El fiscal pide 12 años de prisión para los implicados en el aborto de una menor

Más de 12 años de prisión menor y multas por valor de 530.000 pesetas solicita el fiscal para los cuatro procesados por un presunto delito de aborto practicado a la joven de 16 años Claudia R. M., que denunció los hechos en la Comisaría de Port-Bou (Gerona). En esta sórdida historia se encuentran implicados la madre de la joven, Antonia R. M.; su amante, Francisco C. A., y la esposa de éste, Josefa B. M. También se halla procesado el ginecólogo de Figueres Pedro M. C., presunto autor del aborto.Antonia, la madre, es una mujer todavía joven, de unos 40 años, que ha conseguido sostener a sus cua...

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Más de 12 años de prisión menor y multas por valor de 530.000 pesetas solicita el fiscal para los cuatro procesados por un presunto delito de aborto practicado a la joven de 16 años Claudia R. M., que denunció los hechos en la Comisaría de Port-Bou (Gerona). En esta sórdida historia se encuentran implicados la madre de la joven, Antonia R. M.; su amante, Francisco C. A., y la esposa de éste, Josefa B. M. También se halla procesado el ginecólogo de Figueres Pedro M. C., presunto autor del aborto.Antonia, la madre, es una mujer todavía joven, de unos 40 años, que ha conseguido sostener a sus cuatro hijos con enorme esfuerzo, desarrollando distintos trabajos. Su amistad con Francisco, hombre maduro, chófer en Port-Bou, se convirtió con el tiempo en una relación mucho más íntima. Por este motivo también se fueron estrechando los contactos entre Francisco y la hija de su amante, Claudia, con quien acabó manteniendo contactos carnales. La situación, que era conocida por Josefa, esposa del chófer, llegó al límite a finales de 1981, cuando la niña anunció su embarazo.

Tras un peregrinaje realizado por distintas capitales europeas, la niña regresó sin haber abortado. Fue en la consulta de Pedro, médico ginecólogo afincado en Figueres, donde, según parece, encontraron a alguien dispuesto a ayudarles. Normalizada la situación, los protagonistas de esta historia reanudaron su vida habitual en Port-Bou. En agosto de 1982, los intentos de la madre por alejar a Claudia de Francisco culminaron con la reacción de la joven que, en la comisaría de la localidad, denunció lo sucedido.

Tras la calificación del fiscal, la vista del juicio oral no tardará mucho. El principal acusado es Francisco, para quien el, ministerio fiscal solicita una pena de cuatro años, dos meses y un día de prisión menor por un delito de estupro, y otra más de dos años, cuatro meses y un día, también de prisión menor, por un delito de aborto. Para Pedro, el médico, además de una multa de 500.000 pesetas, el fiscal solicita la pena de cuatro años de prisión menor. Para el resto de los inculpados las penas solicitadas son de un año de prisión menor para Josefa, seis meses y un día para la madre y una multa de 30.000 pesetas para la niña.

El Código Penal señala que es reo de un delito de estupro "la persona que tuviere acceso camal con otra mayor de 12 años y menor de 18, prevaliéndose de su superioridad originada por cualquier relación o situación". La condición de superioridad de Francisco respecto de la niña es evidente para el fiscal, que solicita la pena de prisión menor en su grado máximo, conclusión que se puede hacer extensiva al ginecólogo.

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