El escándalo periodístico de los falso diarios de Hitler

La credibilidad del 'Sunday Times', seriamente afectada

La pretendida exclusiva mundial de los diarios de Hitler le ha costado al Sunday Times algo más de los 250.000 dólares (32,5 millones de pesetas) que pagó como adelanto: su credibilidad y la de uno de sus directores, el historiador Trevor Ropper, que certificó muy a la ligera la autenticidad de los orginales de Stern, para volverse atrás a los pocos días. La feroz competencia entre los diarios británicos, especialmente los que se editan los domingos, obligados a llenar varios cuadernillos y a publicar decenas de reportajes exclusivos, había llevado ya al ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La pretendida exclusiva mundial de los diarios de Hitler le ha costado al Sunday Times algo más de los 250.000 dólares (32,5 millones de pesetas) que pagó como adelanto: su credibilidad y la de uno de sus directores, el historiador Trevor Ropper, que certificó muy a la ligera la autenticidad de los orginales de Stern, para volverse atrás a los pocos días. La feroz competencia entre los diarios británicos, especialmente los que se editan los domingos, obligados a llenar varios cuadernillos y a publicar decenas de reportajes exclusivos, había llevado ya al Sunday Times a caer en otro timo: hace varos años compró. los diarios de Benito Mussolini, que habían sido pacientemente falsificados por dos amables señoras italianas.Desde el primer momento los diarios de la competencia se lanzaron despiadadamente sobre el Sunday Times, acusándole de ingenuo y poco fiable. El mismo día, 24 de abril, en el que el periódico dominicial anunció a bombo y platillo la inminente publicación de los resúmenes, el Sunday Mail tituló en primera página: "El timo de los diarios de Hitler: un millón de libras". The Observer se mostró más moderado: "Serias dudas sobre su autenticidad". Las críticas se centraron, fundamentalmente, en el hecho de que un periódico se embarcara en semejante operación sin tener pruebas irrefutables de la autenticidad de los diarios. El Sunday Times se dejó arrastrar por Stern a una publicación temprana y falta de garantías.

Más información

Cuando las críticas arreciaron, el periódico se apresuró, a congelar la publicación (de hecho no llegó a aparecer ningún resumen porque el primer día se limitaron a relatar cómo habían sido encontrados los cuadernos). Como sucedió en el caso de Stern, los redactores del Sunday Times, que celebraron varias asambleas sobre el tema, advirtieron a la empresa que el escándalo, del que ellos no eran responsables, estaba perjudicando la credibilidad tanto del dominical como del diario. El Sunday Times pertenece a la misma cadena que el famoso diario conservador The Times, recientemente comprado por el magnate australiano Rupert Murdock, propietario también de uno de los periódicos más sensacionalistas de Gran Bretaña, The Sun. Fue precisamente The Times quien publicó pocos días después una nota de la empresa disculpándose con sus lectores y explicando su postura.

Archivado En