Un juez militar ejecutará la sentencia del 23-F

Madrid El capitán general de la I Región Militar (Madrid), Rafael Allendesalazar, ha nombrado un juez militar para que se encargue de ejecutar la sentencia del Tribunal Supremo contra los condenados por su participación en el frustrado golpe de Estado del 23-F. No existe plazo concreto para dicha ejecución, pero la misma culminará con la publicación en el Diario Oficial del Ejército de las bajas definitivas en las Fuerzas Armadas de los doce militares condenados a penas superiores a los tres años y un día de prisión militar.

El proceso de ejecución de la sentencia se iniciará con la com...

Madrid El capitán general de la I Región Militar (Madrid), Rafael Allendesalazar, ha nombrado un juez militar para que se encargue de ejecutar la sentencia del Tribunal Supremo contra los condenados por su participación en el frustrado golpe de Estado del 23-F. No existe plazo concreto para dicha ejecución, pero la misma culminará con la publicación en el Diario Oficial del Ejército de las bajas definitivas en las Fuerzas Armadas de los doce militares condenados a penas superiores a los tres años y un día de prisión militar.

El proceso de ejecución de la sentencia se iniciará con la comunicación oficial de la misma a los afectados. Posteriormente, será enviada una copia al ministro de Defensa, Narcís Serra, quien tendrá que decidir los centros militares en que deberán cumplir sus penas los condenados. Según informaciones del departamento, los principales jefes de la rebelión serán recluidos, por separado, en cuatro o cinco castillos militares. En el de Figueras (Gerona) será recluido, por ejemplo, el ex general Jaime Milans del Bosch. El resto de condenados cumplirán sus condenas en la prisión militar de Alcalá de Henares (Madrid).El ministro de Defensa también hará llegar la sentencia a los cuarteles generales de los tres Ejércitos, donde serán redactadas las correspondientes órdenes de baja para los militares expulsados de las Fuerzas Armadas. Las órdenes serán publicadas en el Diario Oficial del Ejército. En el caso de los generales expulsados (Milans, Armada y Torres Rojas), las bajas tendrán rango de real decreto, ya que también por real decreto se produjeron los ascensos al generalato. Esto significa que las bajas de los tres citados serán sancionadas por el Rey. A partir de ese momento, los expulsados tendrán que remitir al Ministerio de Defensa los títulos, diplomas y documentos de distinciones que hayan obtenido a lo largo de su carrera militar.

En cuanto les sea comunicada oficialmente la sentencia a los expulsados, éstos ya no podrán vestir el uniforme militar. De hecho, según fuentes de sus abogados, la mayoría de ellos ya no lo utilizan estos días. Milans, por ejemplo, dejó de emplearlo el mismo día en que se hizo pública la sentencia, fecha en, que regaló las insignias de general a su abogado defensor, Santiago Segura. Este abogado dijo ayer que Milans le ha prohibido que se dirija al Rey para solicitarle un indulto personal. Los abogados defensores del General Milans del Bochs y del teniente coronel Tejero, entre otros, redactan los recursos de amparo que dirigirán al Tribunal Constitucional.