Comprueban la relación entre alteraciones cerebrales y delincuencia

La relación entre tempranas perturbaciones del cerebro y diversas formas de delincuencia ha sido comprobada por un equipo de investigadores de la ciudad de Gotemburgo (Suecia) dirigido por el profesor Ingemar Petersen. Los resultados parecen probar que a través de estudios encefalográficos es posible detectar con mucha anticipación la predisposición a una conducta irregular.

La investigación del equipo sueco comenzó en 1958 en el hospital Sahlgrenska de la mencionada ciudad con el estudio de 571 jóvenes cuyas edades oscilaban entre uno y 21 años, ninguno de los cuales presentaba les...

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La relación entre tempranas perturbaciones del cerebro y diversas formas de delincuencia ha sido comprobada por un equipo de investigadores de la ciudad de Gotemburgo (Suecia) dirigido por el profesor Ingemar Petersen. Los resultados parecen probar que a través de estudios encefalográficos es posible detectar con mucha anticipación la predisposición a una conducta irregular.

La investigación del equipo sueco comenzó en 1958 en el hospital Sahlgrenska de la mencionada ciudad con el estudio de 571 jóvenes cuyas edades oscilaban entre uno y 21 años, ninguno de los cuales presentaba lesiones cerebrales o había tenido enfermedades capaces de dejar secuelas en su sistema nervioso. Paralelamente, en el mismo hospital se montó un servicio destinado a reunir datos sobre la conducta social de los jóvenes estudiados.

De estas investigaciones surgió que 54 de ellos habían cometido distintas formas de delitos que constaban en los archivos de la policía.

Un estudio encefalográfico sistemático del grupo permitió comprobar que los 54 presentaban alteraciones en su actividad cerebral que, si bien no se traducían en manifestaciones patológicas evidentes, indicaban una falta de madurez en el cerebro que explicaría su conducta social irregular.

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