Fulminante cese del ministro chino de Exteriores tras su viaje a Moscú

El régimen chino parece haber rectificado rápidamente su aparente mejora de relaciones con la Unión Soviética al destituir fulminantemente ayer a su ministro de Asuntos Exteriores, Huang Hua, que hizo el jueves una declaración conciliadora con Moscú, al tiempo que el primer ministro Zhao Ziyang pronunciaba un discurso sorprendentemente favorable a Estados Unidos.

La entrevista, el martes pasado en Moscú, entre Huang Hua y su homólogo soviético, Andrei Gromiko -el encuentro bilateral de más alto nivel desde hace trece años-, suscitó en Occidente todo tipo de especulaciones sobre una posi...

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El régimen chino parece haber rectificado rápidamente su aparente mejora de relaciones con la Unión Soviética al destituir fulminantemente ayer a su ministro de Asuntos Exteriores, Huang Hua, que hizo el jueves una declaración conciliadora con Moscú, al tiempo que el primer ministro Zhao Ziyang pronunciaba un discurso sorprendentemente favorable a Estados Unidos.

La entrevista, el martes pasado en Moscú, entre Huang Hua y su homólogo soviético, Andrei Gromiko -el encuentro bilateral de más alto nivel desde hace trece años-, suscitó en Occidente todo tipo de especulaciones sobre una posible mejora de las relaciones chino-soviéticas, que el propio jefe de la diplomacia china pareció confirmar al confersarse el jueves, a su regreso a Pekín, "optimista" sobre el porvenir del diálogo entre ambas capitales.Aunque el relevo de Huang Hua al frente de la cartera de Exteriores estaba previsto desde hace tiempo, su declaración, considerada la más apaciguadora con la URSS efectuada por un dirigente chino desde la ruptura chino-soviética, a principios de los sesenta, parece haberlo precipitado, poniendo así de manifiesto la desaprobación de las máximas autoridades chinas ante sus palabras.

El primer ministro Zhao Z¡yang salió también al paso de las especulaciones occidentales y de los eventuales temores norteamericanos ante un deshielo chino-soviético al afirmar ayer en Pekín ante el jefe del Gobierno tailandés, Prem Tinsulanonda, que China y Estados Unidos "tienen un interés común por preservar la paz y la seguridad en el mundo", y recordó el peligro que supone para su país la "amenaza" soviética.

Junto con la sustitución de Huang Hua por Wu Xueqian se anunció también en la capital china el reemplazo del ministro de Defensa, Geng Biao, por Zhang Aiping, con la quie culmina la reestructuración de la jerarquía militar íniciada tras las críticas formuladas por sectores castrenses disgustados por el abandono de la tradición revolucionaria maoísta.

Estos cambios, de no ser compensados en los últimos días por otros nombramientos de signo opuesto, consolidan el poder de Deng Xiaoping.

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