Los palestinos de Cisjordania quieren proseguir la lucha

La negativa de los países árabes -de todos los países árabes- a recibir eventualmente a los combatientes palestinos de Beirut oeste ha supuesto para los palestinos que viven en los territorios ocupados por Israel una bofetada en pleno rostro. Sin embargo, algunos palestinos de Cisjordania se muestran decididos a proseguir la lucha "por todos los medios, incluso si Beirut cae o si Yasir Arafat abandona la lucha".

¿Por qué medios? Evidentemente, esto no puede ser confesado a un periodista, y tal vez ni ellos mismos lo sepan, pero no es difícil comprender que la lucha, a partir de ese ...

La negativa de los países árabes -de todos los países árabes- a recibir eventualmente a los combatientes palestinos de Beirut oeste ha supuesto para los palestinos que viven en los territorios ocupados por Israel una bofetada en pleno rostro. Sin embargo, algunos palestinos de Cisjordania se muestran decididos a proseguir la lucha "por todos los medios, incluso si Beirut cae o si Yasir Arafat abandona la lucha".

¿Por qué medios? Evidentemente, esto no puede ser confesado a un periodista, y tal vez ni ellos mismos lo sepan, pero no es difícil comprender que la lucha, a partir de ese momento, será "total y sin piedad". "El diálogo político con la izquierda israelí", confiesan, "es tiempo perdido. La lucha a ultranza, incluso con misiones suicidas es lo que hace falta para mostrar a Ariel Sharon y a los norteamericanos que no se puede destruir el alma del pueblo palestino".

Pero la pesadumbre por la falta de apoyo del mundo árabe es grande. "Ayer nos traicionaron, nos abandonaron frente al Ejército israelí. Hoy osan cerrar sus puertas a los supervivientes.

El clima es pesado, agobiante, en Cisjordania. Por supuesto que los jóvenes se manifiestan; los alcaldes, salvo escasas excepciones, continúan oponiéndose a los decretos de las autoridades israelíes; se votan mociones de solidaridad con los palestinos de Líbano y se envían a la ONU, a París y a Moscú. Pero cunde el desánimo. ¿Cómo podría ser de otro modo tras la catástrofe de Líbano, cuando los dirigentes de la OLP están sitiados en Beirut, a merced de los cañones israelíes?