Indicios de recuperación económica, según la CEE

La economía europea puede crecer en 1983 en un 2,6%, lo que supondría una recuperación interesante y el fin del túnel de la recesión, si se logra controlar las altas tasas de interés norteamericanas, según un informe confidencial elaborado por la comisión europea que será estudiado por la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los diez países de la CEE que se inaugura mañana, en Bruselas.Las optimistas previsiones de los expertos comunitarios no son aplicables al paro. Según dicho estudio, el desempleo seguirá creciendo, aunque a un ritmo inferior al actual. A fines del presente año...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La economía europea puede crecer en 1983 en un 2,6%, lo que supondría una recuperación interesante y el fin del túnel de la recesión, si se logra controlar las altas tasas de interés norteamericanas, según un informe confidencial elaborado por la comisión europea que será estudiado por la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de los diez países de la CEE que se inaugura mañana, en Bruselas.Las optimistas previsiones de los expertos comunitarios no son aplicables al paro. Según dicho estudio, el desempleo seguirá creciendo, aunque a un ritmo inferior al actual. A fines del presente año, los diez soportarán más de diez millones de parados, lo que supone el 9,2% de su población activa, y a fines de 1983, pese a esa recuperación de la economía, el índice de paro puede situarse en un 9,4%. El desempleo experimentó un aumento en flecha en los países comunitarios en los dos últimos años, pasando desde sólo un 6% en 1980 hasta el 9,2% mencionado.

Los resultados serán mucho más notables en el campo de la lucha contra la inflación. Los economistas de la comisión estiman que en 1983 se podrá reducir la inflación a un 9,5%, lo que significaría bajar a un solo guarismo por primera vez en tres años. En 1980, la inflación media de los diez fue del 11, 1 %; en 1981 pasó al 10,9%, y en 1982 se situará en un 10,2%. Evidentemente se trata de cifra media, porque los índices de inflación varían entre el 3,7% de la República Federal de Alemania (RFA) y el casi 20% de Grecia, pasando por el 12% previsible para Francia. Los expertos estiman que para lograr ese 9,5% será necesario coordinar las acciones de los Estados miembros de la CEE para la reducción de los déficits presupuestarios y, sobre todo, para mantener y, en lo posible, reforzar el Sistema Monetario Europeo (SME).

El informe de la comisión recoge la tesis francesa según la cual los diez deben propiciar las inversiones en sectores productivos, como las tecnologías de punta y técnicas de reducción de energía.

Los primeros indicios de la recuperación de la economía europea podrán empezarse a sentir en el último trimestre del presente año, pero sólo podrán alcanzar un nivel significativo en 1983. Dicha recuperación será debida al aumento del consumo privado y al incremento de las inversiones. Sin embargo, nada será posible si Estados Unidos no controla su política monetaria e impide el mantenimiento de las altas tasas de interés actuales. La actual política norteamericana tiene unas consecuencias desastrosas para las inversiones en Europa occidental, elemento prioritario de toda recuperación.

Para los expertos comunitarios, el producto interior bruto de los diez no creció en 1982 en un 2%, como habían previsto inicialmente, sino sólo en un 1,5%, precisamente por culpa del monetarismo de Reagan.

Los jefes de Estado y de Gobierno de los diez dedicarán una atención preferente en su próxima cumbre no sólo al análisis de este informe, sino, sobre todo, al estudio de sus relaciones con Estados Unidos.

Archivado En