El subsecretario de Empleo afirma desconocer el pacto secreto con los sindicatos sobre contratación temporal

El subsecretario de Empleo, Miguel Cuenca, afirmó ayer que desconocía la existencia de un acuerdo entre Gobierno y sindicatos sobre los decretos de contratación temporal. Para Miguel Cuenca, los únicos textos en los que se basa la modificación de los decretos son los del propio Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE) y los decretos anteriores que facultan al Gobierno para su modificación. Por otra parte, fuentes sindicales reconocieron ayer el acuerdo secreto, paralelo al ANE, que limitaba la contratación temporal, y del que daba cuenta este periódico en su edición de ayer.

El nuevo decreto...

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El subsecretario de Empleo, Miguel Cuenca, afirmó ayer que desconocía la existencia de un acuerdo entre Gobierno y sindicatos sobre los decretos de contratación temporal. Para Miguel Cuenca, los únicos textos en los que se basa la modificación de los decretos son los del propio Acuerdo Nacional sobre Empleo (ANE) y los decretos anteriores que facultan al Gobierno para su modificación. Por otra parte, fuentes sindicales reconocieron ayer el acuerdo secreto, paralelo al ANE, que limitaba la contratación temporal, y del que daba cuenta este periódico en su edición de ayer.

El nuevo decreto, inesperadamente discutido y aprobado anteayer en Consejo de Ministros, refunde toda la normativa existente en esta materia, dando mayores facilidades a las empresas para la contratación de trabajadores eventuales y ampliando los porcentajes de eventuales en función del número de fijos de plantilla.Miguel Cuenca, promotor del nuevo decreto, señaló que la intención que había llevado al Ministerio de Trabajo a modificar la normativa existente era conseguir una mayor agilidad en la contratación temporal. "Desconozco", señaló Cuenca, "que hubiera pacto alguno en contra de modificar la normativa existente. Los decretos en vigor facultan al Gobierno para su modificación, exigiendo únicamente que se consulte a las partes, patronal y sindicatos. En este caso así lo hemos hecho. Por otra parte, nos hemos atenido al propio texto del Acuerdo Nacional sobre Empleo, que reconoce la importancia del desarrollo del Estatuto de los Trabajadores de cara a la generación de empleo".

El temor a la flexibilidad de plantillas fue, según las fuentes consultadas, la razón que movió a los sindicatos a exigir un compromiso por escrito a los representantes del Gobierno de que no se sobrepasarían ciertos límites a la hora de redactar la normativa. La propia firma del ANE estuvo pendiente de este acuerdo, que provocó largas y laboriosas negociaciones entre ambas partes. Manuel Chaves y José Luis Corcuera, de UGT, fueron quienes más interés pusieron en que la palabra de Juan Antonio García Díez, vicepresidente económico, y Jesús Sancho Rof, entonces ministro de Trabajo, quedaran refrendadas con su firma, a pesar de que ambos insistieron en el carácter de pacto de caballeros del citado acuerdo.

En este sentido, alguien recuerda todavía que, tras la firma del documento en la noche más larga del ANE, la pluma estilográfica de Sancho Rof -la misma con la que se firmó el pacto- quedó en poder de José Luis Corcuera como consecuencia de una apuesta anterior entre el ministro y el sindicalista.

Al margen de anécdotas, el tema de la contratación temporal enturbió en un determinado momento las negociaciones del ANE, por la insistencia de los sindicatos en "poner fronteras" a la flexibilidad de plantillas. Sólo el acuerdo entre los representantes del Gobierno y de los sindicatos logró desbloquear la situación. Fruto de estas negociaciones es la inclusión "con calzador" del punto VIL2, del ANE, en el que ambas partes reconocen la importancia del desarrollo del Estatuto de los Trabajadores para generar empleo.

Los sindicatos, en contra

CC OO y UGT, tras la aprobación del nuevo decreto en Consejo de Ministros, acusaron al Gobierno de ampliar aún más las posibilidades de flexibilizar las plantillas que ya se recogían en la normativa anterior. José Luis Corcuera, de UGT, afirmó que "no hay razón que justifique las modificaciones. La normativa anterior ya era bastante generosa y no hay ninguna empresa que haya cubierto el cupo de eventuales. Ampliarlo carece de sentido".

En cuanto a la posibilidad de que los empresarios utilizasen el nuevo-decreto, Corcuera advirtió que "si ahora lo hacen, es que alguien ha estado boicoteando sistemáticamente la normativa anterior, y habría que preguntarse, con qué objetivo".

En un comunicado hecho público ayer, la central socialista señala que esta mayor flexibilidad de plantillas obedece más a unas ideas inspiradas en la filosofía que al respecto mantiene la CEOE que a razonamientos económicos; aspecto en el que coincide Antonio Gutiérrez, que, refiriéndose a un acuerdo del secretariado de CC OO, señaló que "el Gobierno, con la aprobación del decreto, incumple cuantos compromisos había asumido con los sindicatos a raíz de la firma del ANE". Antonio Gutierrez añadió que "las modificaciones van encaminadas a destruir el empleo fijo, sustituyéndolo por trabajo en precario, en la línea de la reivindicación patronal de llegar a la total flexibilidad de plantillas". El dirigente sindical afirmó que CC OO se opondrá, por todos los medios constitucionales a su alcance, a la aplicación de este decreto, añadiendo que esta oposición sería llevada a cada una de las empresas donde se quisieran aplicar las nuevas medidas.

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