Temor a un nuevo fracaso en la 'cumbre' comunitaria del día 29

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Comunidad Económica Europea (CEE) continuarán hoy reunidos en Bruselas para intentar preparar la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará el próximo día 29 y evitar que termine en un nuevo fracaso.El principal problema sigue siendo, como desde hace dos años, la aportación británica al presupuesto comunitario. Francia, apoyada por otros países, exige que la devolución de dinero a Londres sea una medida temporal y con carácter progresivo, mientras que Londres quiere que sea definitiva (siete años) y no acepta como principio ...

Los ministros de Asuntos Exteriores de la Comunidad Económica Europea (CEE) continuarán hoy reunidos en Bruselas para intentar preparar la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará el próximo día 29 y evitar que termine en un nuevo fracaso.El principal problema sigue siendo, como desde hace dos años, la aportación británica al presupuesto comunitario. Francia, apoyada por otros países, exige que la devolución de dinero a Londres sea una medida temporal y con carácter progresivo, mientras que Londres quiere que sea definitiva (siete años) y no acepta como principio el carácter de progresividad.

Si la cumbre del día 29 fracasa será dificil solucionar el problema del aumento de los precios agrícolas, que deben entrar en vigor teóricamente el próximo día 1 de abril y que Londres bloquea a la espera de obtener satisfacción para sus propias reivindicaciones.

Las esperanzas de la primera ministra británica, Margaret Thatcher, de convencer al canciller de la RFA, Helmut Schmidt, para que apoye su postura en la reunión del día 29 han desaparecido. Schmidt ha anunciado que Bonn no actuará como mediador.

"La crisis de la Comunidad", afirmó ayer el presidente de la Comisión Europea, Gaston Thorn, "es mayor que nunca. Jamás hemos hecho frente a una situación económica tan mala", explicó, "y jamás ha sido tan evidente el peligro de volver a un proteccionismo y a unos intereses egoístas nacionales que significarían el declinar irreversible del Mercado Común".