Alejandro Nieto hace balance crítico de la actuación del CSIC

El presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Alejandro Nieto, ha rendido cuentas de su actuación durante 1981 al frente de esta institución. Este balance se recoge en un informe hecho público ayer. En el mismo se apuntan los avances conseguidos por el CSIC, así como las reivindicaciones pendientes, las cuales, de no ser satisfechas en breve plazo, convertirán en definitiva la dimisión de Alejandro Nieto, quien ha puesto el cargo a disposición del nuevo ministro de Educación y Ciencia, Federico Mayor Zaragoza.Para Alejandro Nieto, que ya en la primavera pasada anunció su d...

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El presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Alejandro Nieto, ha rendido cuentas de su actuación durante 1981 al frente de esta institución. Este balance se recoge en un informe hecho público ayer. En el mismo se apuntan los avances conseguidos por el CSIC, así como las reivindicaciones pendientes, las cuales, de no ser satisfechas en breve plazo, convertirán en definitiva la dimisión de Alejandro Nieto, quien ha puesto el cargo a disposición del nuevo ministro de Educación y Ciencia, Federico Mayor Zaragoza.Para Alejandro Nieto, que ya en la primavera pasada anunció su dimisión si no se atendían determinadas demandas retributivas del personal, el momento actual del CSIC es «esperanzador» y, según precisa en el informe, «uno de los momentos más importantes de su historia, con el que se ha iniciado una nueva etapa en su vida».

Alejandro Nieto se refiere al cumplimiento de los objetivos inmediatos propuestos en 1980 respecto a la realización de programas sistemáticos de investigación, con los cuales «nuestras actividades científicas abandonan el espontaneísmo individual para convertirse en una actividad sistemática y racional, habiendo sido acogida esta programación con sorpresa y elogio en todos los medios nacionales y extranjeros». El presidente del CSIC, sin embargo, señala que no todos los programas son técnicamente perfectos, sino que «existen aún demasiados que no resisten un análisis imparcial».

Los planes de reestructuración de institutos y centros del CSIC son también tratados en el informe. Este deja constancia de la sustitución de tales medidas por una acción «más modesta y puntual, consistente en el análisis individualizado de algunos centros concretos», sobre los que se han establecido medidas igualmente individualizadas. El problema fundamental advertido estriba en que buena parte de estos institutos no son unidades auténticamente orgánicas, sino meras agrupaciones de investigadores aislados, lo que ocasiona en el CSIC una falta de vertebración.

El informe da cuenta asimismo de la posibilidad de actuación coordinada con los centros de la universidad, cuestión a punto de aprobarse. Y señala que permanecen congelados ros temas de las modificaciones reglamentarias y las autonomías políticas.

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