Nuevo intento negociador entre París y Argel del precio del gas natural

Argelia y Francia han decidido negociar el precio del gas natural licuado argelino vendido al segundo país y han nombrado para ello dos representantes personales de ambos jefes de Estado, quienes iniciarán las consultas exploratorias en los próximos días. Las dos partes desean viabilizar un acuerdo definitivo sobre este delicado tema antes del encuentro que deben mantener los presidentes François Mitterrand y Chadli Bendjedid, en noviembre de este año. Los dos negociadores son el ministro de Finanzas argelino, Mohamed Yala, y el ex ministro galo para las Regiones, Jean Marcel Jeanneney. La so...

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Argelia y Francia han decidido negociar el precio del gas natural licuado argelino vendido al segundo país y han nombrado para ello dos representantes personales de ambos jefes de Estado, quienes iniciarán las consultas exploratorias en los próximos días. Las dos partes desean viabilizar un acuerdo definitivo sobre este delicado tema antes del encuentro que deben mantener los presidentes François Mitterrand y Chadli Bendjedid, en noviembre de este año. Los dos negociadores son el ministro de Finanzas argelino, Mohamed Yala, y el ex ministro galo para las Regiones, Jean Marcel Jeanneney. La solución del conflicto -afirman en Argel- influirá de forma positiva en la cooperación global entre los dos países, en conformidad con el nuevo clima político abierto tras el cambio de Gobierno en Francia.

En aplicación de dos contratos, firmados en 1964 y 1972, por un total de 4.000 millones de metros cúbicos anuales de gas natural licuado (GNL) y un tercero, establecido en 1976, por 5.000 millones suplementarios, a partir de 1981 y por veinticinco años, Francia venía abonando un precio uniforme ligeramente superior a los tres dólares el millón de unidades térmicas, norma británica BTU. Argelia, por su parte, facturaba sus entregas a seis dólares, en aplicación del principio de paridad térmica gas-petróleo.

En 1985, el gas natural argelino debe cubrir el 25% de las necesidades francesas de ese producto energético.

La parte argelina podría proponer un compromiso destinado a valorizar sus recursos energéticos, teniendo en cuenta la situación excepcional del mercado mundial. Un acuerdo entre ambos países ejercería, probablemente, una considerable influencia sobre las demás negociaciones que lleva. a cabo Argel con otros clientes occidentales, entre ellos Enagas.

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