Para Joshua Hassan el ingreso de España en la OTAN significa la apertura de la verja

La urgencia del Gobierno español por conseguir el ingreso en la OTAN servirá para desbloquear el acuerdo de Lisboa sobre Gibraltar y conseguir la apertura de la verja, asegura el ministro principal del Peñón, sir Joshua Hassan, en unas declaraciones a EL PAIS realizadas en la víspera de la llegada a Gibraltar de los príncipes de Gales, Carlos y Diana, prevista para las cinco de la tarde de hoy.El líder gibraltareño, jefe del Gobierno de la Roca y del Partido Laborista de la colonia, que con ocho diputados ostenta la mayoría de la Cámara (quince escaños) de esta ciudad, cree que el incidente hi...

La urgencia del Gobierno español por conseguir el ingreso en la OTAN servirá para desbloquear el acuerdo de Lisboa sobre Gibraltar y conseguir la apertura de la verja, asegura el ministro principal del Peñón, sir Joshua Hassan, en unas declaraciones a EL PAIS realizadas en la víspera de la llegada a Gibraltar de los príncipes de Gales, Carlos y Diana, prevista para las cinco de la tarde de hoy.El líder gibraltareño, jefe del Gobierno de la Roca y del Partido Laborista de la colonia, que con ocho diputados ostenta la mayoría de la Cámara (quince escaños) de esta ciudad, cree que el incidente hispano-británico por la llegada de los príncipes al Peñón no afectará al acuerdo -negociador de Lisboa que Marcelino Oreja, entonces ministro de Asuntos Exteriores, y lord Carrington establecieron en la capital portuguesa en abril del pasado año. Sir Joshua Hassan afirma que sería "irrisorio pensar en que España pueda ingresar en la OTAN y a la vez mantener cerrada la frontera con Gibraltar". Asimismo, el político gibraltareño insiste en que la candidatura de España, tanto en la OTAN como en la CEE, garantiza el cumplimiento del acuerdo de Lisboa y la apertura de la verja, dado que el ingreso de España en ambas organizaciones internacionales no podría realizarse mientras la frontera gibraltareña permaneciera cerrada.

El propio Hassan cree saber que en el último encuentro entre lord Carrington y el ministro Pérez Llorca, en Bruselas, el pasado día 3, ambos políticos discutieron el problema de Gibraltar en la óptica del calendario español para el ingreso en la Alianza Atlántica.

En sus declaraciones, el ministro principal de Gibraltar ha subrayado otros temas. En primer lugar, el hecho de que la llegada de los príncipes de Gales a la Roca se va a convertir en una manifestación de exaltación británico-gibraltareña similar, en su alcance y pasión, a otras dos precedentes: una en 1954, con motivo de la llegada de la reina Isabel II, y otra el 1967, durante el referéndum en el que se confirmó la opción británica de los gibraltareños en contra de las tesis españolas y de las recomendaciones de la ONU.

Los príncipes, por la calle Real

Como se temían las autoridades españolas, la escala en la Roca de los príncipes Carlos y Diana tenía sus efectos políticos, que hoy mismo se van a confirmar a lo largo del recorrido que la pareja realizará por la calle Real de Gibraltar, abrumada de banderas y de retratos de los príncipes. Sir Joshua Hassan está en el estrellato, y no para de vender a los cuatro vientos, a informadores de todo el mundo desplazados al Peñón, sus posiciones políticas sobre la situación del Peñón, las restricciones impuestas por España desde 1969 y la idiosincrasia de su pueblo.Hassan insiste en que con esta escala, y a pesar de sus efectos políticos ya probados, no se trataba de ofender a los españoles. Para él, si los príncipes de Gales debían iniciar un crucero privado por el Mediterráneo, era lógico que utilizaran el puerto de Gibraltar, británico y de la OTAN, para la travesía del Britannia. El yate real llegó ayer a este puerto para aparcar puntualmente, a las nueve de la mañana, junto a la torre del Almirante.

Hassan ha querido también puntualizar las declaraciones que se le atribuyen sobre la actitud del Rey de España de no asistir a la boda. Al líder gibraltareño se le apuntó la frase de que el acto negativo del Rey "era pueril". Segun Hassan, eso no lo dijo él; añadió que había dicho que era pueril ligar el problema de Gibraltar con la visita privada, y que desde luego no era su intención ofender al Rey por quien siente una gran admiración "por su labor en pro de la democracia española, una labor que, reconoce el pueblo gibraltareño, aunque éste no quiera ser su súbdito".