La rehabilitación del casco antiguo de Madrid costará 300.000 millones

Las asociaciones de vecinos del distrito Centro han iniciado una campaña de agitación ciudadana para conseguir la rehabilitación del casto antiguo de la ciudad, lo que supondría un gasto de 30.000 millones de pesetas, por medio de ayudas económicas de la Administración a los propietarios, y, antes que nada , eliminar las modificacones hechas por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) al Plan Especial de Protección de Edificios y Conjuntos Histórico-Artísticos.

La campaña se inicia después de que las asociaciones vecinales de Malasaña y La Corrala hayan analizado el alcance d...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Las asociaciones de vecinos del distrito Centro han iniciado una campaña de agitación ciudadana para conseguir la rehabilitación del casto antiguo de la ciudad, lo que supondría un gasto de 30.000 millones de pesetas, por medio de ayudas económicas de la Administración a los propietarios, y, antes que nada , eliminar las modificacones hechas por el Ministerio de Obras Públicas y Urbanismo (MOPU) al Plan Especial de Protección de Edificios y Conjuntos Histórico-Artísticos.

La campaña se inicia después de que las asociaciones vecinales de Malasaña y La Corrala hayan analizado el alcance del Plan Especial y hayan llegado a la conclusión de que las modificaciones hechas desde Coplaco disminuyan las garantías de conservación de todo el parque de viviendas del centro de la ciudad.Según conclusiones de estas entidades ciudadanas, el plan no supone ninguna garantía para la recuperación de setenta importantes edificios histórico-artísticos, sobre los que pesan otros tantos expedientes de ruina, y de otras doscientas construcciones que se, encuentran afectadas por apertura de expedientes de ruina, cuyos trámites se, iniciaron hace escasamente dos años.

Al margen de la situación de estos edificios concretos, prácticamente la mayoría de las viviendas de las zonas de Malasaña y La Latina requieren una urgente actuación de cara a garantizar su conservación y su habitabilidad.En este sentido, Enrique Macias, arquitecto de la Asociación de Vecinos de Malasaña, asegura que son cientos las viviendas de la zona que carecen de los más elementales servicios y que sufren todo tipo de humedades y goteras en el momento en que llueve mínimamente sobre Madrid. «No se puede hablar con cifras exactas, pero si visitas cualquier patio de vecinos y entras en las casas, además de que muchas de ellas tienen unas proporciones minúsculas, te encuentras con que tienen los servicios en el pasillo y que carecen, incluso de algo tan elemental como, la ducha» En estas casas, casi todas de renta antigua, ha sido muy difícil forzar a los propietarios a realizar obras de reparación, en algunos casos, por esperar la declaración de ruina y vender después el solar, y en otros, por falta de posibilidades económicas del propietario. Así las cosas, el deterioro de las viendas en la zona ha llegado a tal extremo que, según cálculos de las asociaciones de vecinos, la rehabilitación del casco antiguo supondría una inversión pesetas, aproximadamente.

Protestad los afectados

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La campaña por la recuperación y conservación del casco antiguo ha consistido, hasta el momento en la presentación dee un recurso de alzada interpuesto por las asociaciones de Malasaña y La Corrala ante el MOPU para revocar las alegaciones introducidas por este organismo al Plan Especial.

Para apoyar esta acción, las asociaciones están recogiendo firmas entre los vecinos afectados, a fin de garantizar la conservación del parque de viviendas. Además, el próximo día 13, han previsto la celebración de una manifestación que irá desde Lavapiés hasta la plaza Mayor, y otro día, cuya fecha no está determinada, convocarán una concentración ante el MOPU.

Enrique Macías explica que, además de estas acciones, se celebrarán numerosas asambleas en las asociaciones de vecinos, donde la opinión más generalizada de los afectados es la de reconocer la necesidad de ayuda económica de los organismos oficiales para las obras, a la vez que se obliga a la propiedad a evitar el deterioro de las viviendas. Paralelamente, piden una actualización de la ley de Arrendamientos Urbanos.

Como primera medida para esta rehabilitación, las asociaciones de vecinos de La Corrala y Malasaña plantean la necesidad de que una comisión, formada por representantes del MOPU, Ayuntamiento y las propias asociaciones, se encargue de elaborar un plan de actuación en esta zona. La primera fase de actuación subondría la inversión de mil miillones de pesetas, que consideran debe ser ,financiada por el sector público, y en este sentido, han solicitado ya al Ayuntamiento 250 millones de pesetas con caigo al presupuesto ordinario, y al MOPU, los restantes 7,50 millones.

Según Palabras de Enrique Macías, se trataría de que el MOPU dictara una orden comunicada semejante a la de los barrios en remodelación que supusiera la puesta en marcha del plán.

Archivado En