El INI no cede en sus reivindicaciones sobre las inversiones de Pegaso en Venezuela

ENASA, fabricante de los camiones Pegaso, y el INI, principal accionista de la empresa española de vehículos industriales, no han renunciado en ningún momento a recibir compensaciones por daños y perjuicios por la -a su juicio- irregular actuación del Gobierno venezolano respecto a sus inversiones en aquel país, según ha podido saber EL PAIS de fuentes próximas a la parte española en litigio. Mientras Juan Manuel Núñez -consejero delegado de ENASA- sigue en Venezuela negociando la resolución del problema, el INI mantiene su postura de no enviar ni una sola peseta más y reclamar indemnizaciones...

ENASA, fabricante de los camiones Pegaso, y el INI, principal accionista de la empresa española de vehículos industriales, no han renunciado en ningún momento a recibir compensaciones por daños y perjuicios por la -a su juicio- irregular actuación del Gobierno venezolano respecto a sus inversiones en aquel país, según ha podido saber EL PAIS de fuentes próximas a la parte española en litigio. Mientras Juan Manuel Núñez -consejero delegado de ENASA- sigue en Venezuela negociando la resolución del problema, el INI mantiene su postura de no enviar ni una sola peseta más y reclamar indemnizaciones incluso por las vías jurídicas que determine la legislación internacional vigente.El desmentido por parte de Juan Manuel Núñez en el sentido de que en ningún momento se había pensado acudir al Tribunal Internacional de La Haya -en contra de lo publicado por EL PAIS de 13-11-1980- habría sido realizado ante la enorme convulsión producida en Venezuela por la información de este periódico y con el claro propósito de facilitar al máximo las difíciles negociaciones entre el Gobierno venezolano y la empresa española.

Debido a que el Gobierno de Herrera Campins no ha cumplido los compromisos internacionales previamente contraídos por el Estado venezolano, el Instituto Nacional de Industria español, afectado negativamente por ello y cansado de la permanente indecisión de los responsables de aquel país, decidió hace un mes no seguir enviando ni una sola peseta más a Venezuela, no responder a los créditos contraídos y forzar a la suspensión de pagos de HIVEMCA -sociedad mixta, hispano-venezolana, con mayoría de esta última, que debería fabricar motores para todo el Pacto Andino.

Liquidación de la sociedad

La presencia en Venezuela de Juan Manuel Núñez está motivada precisamente para tratar la liquidación de la sociedad. Núñez, que próximamente dejará el puesto de consejero delegado de ENASA -le corresponde ya a los norteamericanos de International Harvester, que recientemente llegaron a un acuerdo de compra de parte del accionariado de ENASA y a la creación de una sociedad conjunta- para pasar a la presidencia de otra de las sociedades controladas por el INI, ha desmentido únicamente que el caso pueda presentarse ante el Tribunal Internacional de La Haya, pero nunca que no lo sea ante cualquier otro.De cualquier forma, ni el INI ni ENASA han descartado en ningún momento llevar el caso donde sea preciso y encausar al Gobierno venezolano si éste no se aviene a razones. Una posible salida sería la de, además de la liquidación de HIVENICA, la concesión a Desiauto -la otra empresa venezolana con participación de ENASA, dedicada ésta a la comercialización- de licencias de importación, libres de aranceles, para camiones completos fabricados por Pegaso en España.