Nuevo retraso en la liberación de los rehenes norteamericanos
El secretario de Estado norteamericano, Edmund Muskie, declaró ayer en Washington que los últimos acontecimientos en relación con el asunto de los rehenes norteamericanos eran sólo «etapas iniciales de un proceso que necesitará tiempo, paciencia y diplomacia», dando así claramente a entender que la Administración estadounidense no consideraba inminente la liberación de los secuestrados.Con anterioridad, el Departamento de Estado aseguró que Estados Unidos no aceptaba la liberación por grupos de los 52 rehenes, dando al traste con la posibilidad brindada por el Majlis al Gobierno de Teherán de ...
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El secretario de Estado norteamericano, Edmund Muskie, declaró ayer en Washington que los últimos acontecimientos en relación con el asunto de los rehenes norteamericanos eran sólo «etapas iniciales de un proceso que necesitará tiempo, paciencia y diplomacia», dando así claramente a entender que la Administración estadounidense no consideraba inminente la liberación de los secuestrados.Con anterioridad, el Departamento de Estado aseguró que Estados Unidos no aceptaba la liberación por grupos de los 52 rehenes, dando al traste con la posibilidad brindada por el Majlis al Gobierno de Teherán de soltar paulatinamente a los secuestrados a medida que Washington cumplía las cuatro condiciones requeridas: no injerencia en los asuntos internos iraníes, retirada de todas las querellas presentadas contra Irán, devolución de los haberes iraníes bloqueados en Estados Unidos y de la fortuna del depuesto y fallecido sha.
Anoche, el embajador de Argelia en Estados Unidos entregó en el Departamento de Estado el documento oficial con las condiciones que el Parlamento iraní impuso a Washington. El domingo, Carter, que reaccionó favorablemente a las propuestas iraníes, había enviado, a través de la Embajada suiza en Teherán, una carta al primer ministro iraní pidiéndole más información. Argelia ha sido encargada por Teherán de organizar material y diplomáticamente la eventual liberación de los secuestrados, quienes han pasado de manos de los «estudiantes islámicos» a estar bajo la custodia del Gobierno iraní.
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