35.000 millones de pesetas cuesta la campaña electoral
El coste de la campaña electoral norteamericana, primarias, convenciones, elección presidencial y congreso supondrá un gasto de unos quinientos millones de dólares (unos 35.000 millones de pesetas), prácticamente el doble de lo gastado en 1976.Legalmente, los candidatos presidenciales deben limitar su gasto a 34 millones de dólares (29,4 millones de ayuda federal y otros 4,6 millones del partido), pero sumados al gasto de las elecciones primarias, convenciones y candidatos para el Congreso, se calcula que rozará cada bando los 250 millones de dólares (unos 19.000 millones de pesetas), tanto la...
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El coste de la campaña electoral norteamericana, primarias, convenciones, elección presidencial y congreso supondrá un gasto de unos quinientos millones de dólares (unos 35.000 millones de pesetas), prácticamente el doble de lo gastado en 1976.Legalmente, los candidatos presidenciales deben limitar su gasto a 34 millones de dólares (29,4 millones de ayuda federal y otros 4,6 millones del partido), pero sumados al gasto de las elecciones primarias, convenciones y candidatos para el Congreso, se calcula que rozará cada bando los 250 millones de dólares (unos 19.000 millones de pesetas), tanto la formación demócrata, en el poder, como la republicana.
Del gasto legal limitado a 34 millones de dólares por candidato (2.400 millones de pesetas), la mitad se destina a, propaganda electoral.
Las contribuciones privadas se limitan a mil dólares (unas 70.000 pesetas), precio que cuesta, en general, participar en cualquier cena electoral, cuya principal misión es recaudar fondos. Los organismos pueden contribuir con otros 5.000 dólares, como máximo.
Es evidente que para cualquier aspirante a la presidencia que no cuente con el apoyo de un partido mayoritario las dificultades económicas son de primer orden.