Joseph Luns previene a la OTAN sobre la potencia naval soviética
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Joseph Luns, lanzó ayer una seria advertencia a los países aliados sobre la cada día más eficaz fuerza naval soviética («Moscú debe tener un gran plan para la dominación de los mares, a gran escala») y sobre el deseo del Kremlin de poseer «un punto de estrangulamiento » de la economía occidental, estrategia en la que se debe encuadrar la invasión de Afganistán.
En una conferencia pronunciada en el Real Instituto de Relaciones Internacionales, de Bruselas, Joseph Luns señaló que la Unión Soviética ha aco...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Joseph Luns, lanzó ayer una seria advertencia a los países aliados sobre la cada día más eficaz fuerza naval soviética («Moscú debe tener un gran plan para la dominación de los mares, a gran escala») y sobre el deseo del Kremlin de poseer «un punto de estrangulamiento » de la economía occidental, estrategia en la que se debe encuadrar la invasión de Afganistán.
En una conferencia pronunciada en el Real Instituto de Relaciones Internacionales, de Bruselas, Joseph Luns señaló que la Unión Soviética ha acompañado la política de distensión de un desarrollo sin precedentes de su potencial militar en todos los campos, tanto nucleares como convencionales. El secretario general de la OTAN puso el acento, sobre todo, en el increíble incremento de su fuerza naval.
«La OTAN», dijo Luns, «es, sobre todo, una alianza marítima. El libre comercio por las rutas marítimas es crucial para la economía occidental, y nosotros no podemos, en forma alguna, permitirnos el lujo de ignorar el enorme esfuerzo soviético en el capítulo naval». Según Luns, la URSS posee una fuerza ofensiva naval ultramoderna y se especula ya con la fabricación de nuevos portaviones nucleares. Por el momento, se puede asegurar ya que Moscú dispone de una considerable fuerza ofensiva anfibia y existen informes recientes sobre la construcción de barcos-hospitales de gran autonomía.
El secretario general de la OTAN lanzó un llamamiento a los aliados para que incrementen sus esfuerzos en este campo, al tiempo que señalaba que, personalmente no cree que «la línea que pasa por 23 grados 27 minutos latitud norte (límites de la Alianza Atlántica) se deba convertir en una barrera artificial para el ejercicio del sentido común y del bien común».