Suárez propone a Felipe González buscar una salida al problema autonómico

Viene de primera página

Oficialmente, el PSOE no ha abierto la carta personal, dado que su destinatario se encontraba ayer en Portugal. Felipe González canceló su participación en un mitin de apoyo al Partido Socialista portugués, previsto para anoche en Setúbal, y emprendió regreso a Madrid, tras conocer la existencia de la carta. El líder socialista se mostró en todo momento reservado respecto a la iniciativa gubernamental y dijo que, antes de emitir opiniones al respecto, esperaba a conocer el texto de la carta.

Esta última contiene, según fuentes dignas de crédito, una oferta de apertura de conversaciones para buscar una solución a la autonomía andaluza, en particular, y al problema autonómico, en general. Se especula también con la posibilidad de otros temas concretos, pero con independencia de los temas puntuales, se cree que el Gobierno trata de introducir un factor de distensión en las relaciones políticas entre los dos principales partidos, muy deterioradas en los últimos meses.

En el campo socialista, la oposición a entrevistarse con Suárez ha sido personalmente mantenida por Felipe González, incluso contra la opinión inicial de algún miembro de la ejecutiva del PSOE. No obstante, tras la votación de confianza a Suárez, Felipe González dijo, a preguntas de los periodistas, que aceptarla un encuentro con Suárez sólo con una convocatoria pública y con orden del día. Fuentes socialistas creen que la iniciativa de Suárez responde a esas condiciones. Al mismo tiempo han indicado que, contra lo que se ha informado, la ejecutiva del PSOE no tiene prevista reunión alguna hasta el próximo día 6 de octubre, si bien se espera el regreso a Madrid de Felipe González, para ver si la novedad de la carta del presidente aconseja una reunión anterior.

El ministro de Administración Territorial, Rodolfo Martín Villa, declaró ayer a Radio Nacional: «Estamos intentando un acuerdo con todos los partidos de ámbito nacional y con los nacionalistas. Yo mismo he participado en algunos contactos con Carrillo y Fraga, y con algunos partidos nacionalistas». Asimismo, medios centristas han resaltado la intervención de Martín Villa en la sesión del martes pasado en el Pleno del Senado, y sus constantes invocaciones al consenso autonómico, aun a costa de reconocer los errores del Gobierno.

En el mismo Pleno del Senado, donde se dio una agria polémica sobre la autonomía andaluza, UCD recibió recomendaciones del Gobierno para que las intervenciones centristas fueran de la máxima suavidad. Las recomendaciones partieron de altos cargos del Ministerio de Administración Territorial, y se cumplieron a pesar de la dureza con que intervinieron los portavoces socialistas.

La posible negociación con el PSOE podría ponerse en marcha en breve plazo, ya que hoy, viernes, el comité ejecutivo de UCD tiene previsto celebrar una reunión dedicada monográficamente al estudio de la cuestión autonómica. Ante esta reunión, fuentes centristas diversas insisten en que en UCID está plenamente aceptada la tesis de que la gobernabilidad del Estado exige una concertación con los grandes partidos de ámbito estatal en el tema autonómico.

Postura del PSA

En esta situación, fuentes parlamentarias manifestaron a EL PAIS que en el seno del Partido Socialista de Andalucía (PSA) se teme que el acercamiento de UCD al PSOE suponga una desviación fundamental del pacto entre el Gobierno y los nacionalistas andaluces, que llevó a éstos a votar la confianza del Gabinete de Adolfo Suárez, ya que si la negociación de los grandes partidos deja en el olvido el primer triunfo del PSA en los debates de la cuestión de confianza, el PSA sería presentado ante el electorado andaluz únicamente como el grupo que apoyó al programa y al Gobierno de la derecha.

Un dirigente del PSA ha comentado en los últimos días que, para una situación límite, este partido no descarta la posibilidad de una retirada de sus representantes en las principales instituciones democráticas, entre ellas el Parlamento español, al igual que hizo el Partido Nacionalista Vasco en el invierno pasado. Ello, además, podría ser una actitud rentable de cara a las próximas elecciones parciales para cubrir dos escaños de senadores por Almería y Sevilla, que el PSA espera ganar, obteniendo con ello representación en la Cámara alta.

Al ser consultado sobre esta posibilidad, el secretario general del PSA, Alejandro Rojas Marcos, desmintió que este partido haya pensado en una salida de este tipo. Afirmó que el grupo andalucista, por el contrario, «valoramos muy positivamente la incorporación del PSOE al acuerdo suscrito por el Gobierno y el grupo andalucista, y vamos a hacer lo posible para que se haga realidad».

Rojas Marcos puso en duda que en la entrevista entre Adolfo Suárez y Felipe González, si lleg,Lra a producirse, se deshiciera el acuerdo alcanzado en el Congreso durante el debate de la moción de confianza, sobre la base d ' el artículo 144 de la Constitución. «Yo oigo decir», afirmó, «que lo que viene a exigir el PSOE es lo mismo que nosotros: respeto al 211 de febrero y la autonomía plena del artículo 151. Entendemos, por tanto, que la incorporación del PSOE al acuerdo no va a suponer una rebaja del mismo».

Ante la posibilidad de que UCD y PSOE pudieran pactar un nuevo arreglo del contencioso autonómico administrativo andaluz sobre la base de la modificación de la ley de Distintas Modalidades de Referéndum, Rojas Marcos señaló que, aunque lo creía innecesario, su partido estaba abierto a cualquier fórmula que garantizara el 29 de febrero y la autonomía plena.

«Creemos», dijo finalmente, «que el acuerdo por nosotros promovido es más ventajoso, porque evita la repetición del referéndum en Almería, pero no nos oponemos a la modificación de la ley».

Por otra parte, el primer teniente de alcalde y portavoz del grupo andalucista en el Ayuntamiento de Granada, Arturo Gorizález Arcas, ha declarado en una reunión de la permanente municipal que «el PSA se muestra firme en conseguir para Andalucía la autonomía del artículo 151 », informa nuestro corresponsal en Granada, .

Por su parte, fuentes del PSOE estiman que el cambio de actitud de UCD obedecería, entre otras cosas, a la sorpresa centrista ante la efectiva contestación del PSOE a la llamada fórmula Martín Villa.