El Ayuntamiento de Alcobendas demolerá esta semana un edificio construido sin licencia

El nuevo edificio del colegio Cíes, en el polígono de Valdelasfuentes, en Alcobendas, construido ilegalmente, ya que el ayuntamiento denegó la correspondiente licencia de obras, podría ser demolido esta misma semana, en cumplimiento del acuerdo que, en tal sentido, adoptó la corporación municipal el día 5 de este mes de septiembre. La demolición, para la que no se conoce todavía fecha fija, está pendiente únicamente, según fuentes municipales, de que se cumplan los plazos legales previstos.

En el caso de que el edificio sea al Fin demolido, esta sería la primera vez que una medida de es...

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El nuevo edificio del colegio Cíes, en el polígono de Valdelasfuentes, en Alcobendas, construido ilegalmente, ya que el ayuntamiento denegó la correspondiente licencia de obras, podría ser demolido esta misma semana, en cumplimiento del acuerdo que, en tal sentido, adoptó la corporación municipal el día 5 de este mes de septiembre. La demolición, para la que no se conoce todavía fecha fija, está pendiente únicamente, según fuentes municipales, de que se cumplan los plazos legales previstos.

En el caso de que el edificio sea al Fin demolido, esta sería la primera vez que una medida de este tipo es adoptada en toda el Area Metropolitana de Madrid desde 1947, excepción hecha de los portales ilegalmente construidos en el número 17 de la calle de Antonio Leyva, que fueron demolidos a principios de 1977. La historia de la ampliación del colegio Cíes comenzó en el momento en que dicho centro escolar, por mediación de su directora, María Amalia Vázquez, solicitó del ayuntamiento licencia de obras para la construcción de un nuevo edificio. Habida cuenta de que el polígono en el que se pensaba construir el nuevo colegio se encuentra totalmente sin urbanizar, en una zona en la que no había sido creada todavía la correspondiente junta de compensación -luego no había un responsable directo de la urbanización- el ayuntamiento la denegó. Temía qué los niños hubieran de llegar al colegio a través de un lodazal en cuanto cayeran las primeras lluvias, repitiendo una historia de la que Alcobendas sabe ya bastante. Sin embargo la dirección del colegio decidió comenzar las obras, a pesar de no disponer de la licencia necesaria. Mientras, se producía una primera consulta del ayuntamiento a la Comisión de Planeamiento y Coordinación del Area Metropolitana (Coplaco), que respondía que la única posibilidad que tenía la corporación era ampararse en el artículo 83 de la ley del Suelo y exigir garantías de urbanización antes de otorgar la licencia. La directora del colegio, por su parte, pidió que fuera Coplaco quien le concediera el permiso de const rucción. Sin embargo, este organismo le respondió diciendo que no podía hacerlo, toda vez que, por él, no podía solicitar :garantías de nada, cosa que correspondía exclusivamente al ayuntamiento.

El edificio, que cubrió aguas la semana pasada, ha sido construido sin ningún tipo de dirección técnica, con el peligro que ello conlleva.

Los arquitectos de la obra fueron los primeros en abandonar el proyecto, habida cuenta de su ilegalidad, otro tanto hicieron, a las pocas fechas, los aparejadores.

A pesar de ello, las obras han continuado a un ritmo acelerado, en un intento, según los concejales, de terminar el edificio y llenarlo de alumnos, con lo que, habida cuenta de la falta de puestos escolares en la zona, los hechos consumados podrían propiciar la permanencia del edificio, a pesar de su ilegalidad.

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