Los empresarios de vidrio y cerámica se oponen a sustituir el fuel por carbón

La patronal del vidrio y cerámica ha manifestado su oposición, por razones técnicas y económicas, al proyecto de reconversión energética -sustitución del fuel por carbón sólido- para el sector que propone la Administración, según informa el Servicio Empresarial de Noticias.Los empresarios del vidrio y, cerámica, en un estudio elaborado al efecto, dicen que tal proyecto es «inviable, inaceptable y exento del menor rigor lógico». En el orden técnico, el estudio destaca la imposibilidad de adaptar los hornos y secadores existentes al nuevo combustible, ya que el empleo del carbón exigiría un camb...

La patronal del vidrio y cerámica ha manifestado su oposición, por razones técnicas y económicas, al proyecto de reconversión energética -sustitución del fuel por carbón sólido- para el sector que propone la Administración, según informa el Servicio Empresarial de Noticias.Los empresarios del vidrio y, cerámica, en un estudio elaborado al efecto, dicen que tal proyecto es «inviable, inaceptable y exento del menor rigor lógico». En el orden técnico, el estudio destaca la imposibilidad de adaptar los hornos y secadores existentes al nuevo combustible, ya que el empleo del carbón exigiría un cambio radical de las citadas instalaciones, lo que supondría una inversión extraordinaria.

Por otra parte, según el citado estudio, la utilización del carbón para el secado y cocción de las piezas entraña el riesgo de la contaminación del producto por las cenizas y la destrucción del refractario del horno.

En el estudio se analiza también la relación entre el consumo de combustible y el valor de las exportaciones en este sector y se indica que el consumo de gasóleo y fuel en el año 1979 fue en vidrio y cerámica de 366.000 toneladas, mientras que el sector tejas y ladrillos fue de 907.000 toneladas. Comparando estos dos sectores en términos del valor de la exportación, el de vidrio y cerámica se situó, en el año 1979, en 7.828,1 millones de pesetas, mientras que el de tejas y ladrillos alcanzó sólo los trescientos millones de pesetas.

Finalmente, el estudio señala que «no existe país en el mundo desarrollado en el que se utilicen otros combustibles que no sean fuel o gas, e incluso en los países subdesarrollados las industrias que se están montando de este tipo utilizan los mismos combustibles».