Cartas al director

La entrada en la OTAN

La posibilidad de que en este país nos conformemos con el desencanto, con la «débil democracia», o con el «más vale poco que nada», me está empezando a preocupar, aunque no a los que pueden solucionarlo.Nos estamos acostumbrando tanto a las cosas que no están bien que el día que tengamos que enfrentarnos con ellas -yo creo que ya es hora- no sabremos.

Todo esto viene a cuento de la alevósica intención de entrar en la OTAN que el ministro de Asuntos Exteriores nos «adelantó» en su entrevista concedida al diario EL PAIS.

Porque no pensemos que eso de entrar en una organizaci...

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La posibilidad de que en este país nos conformemos con el desencanto, con la «débil democracia», o con el «más vale poco que nada», me está empezando a preocupar, aunque no a los que pueden solucionarlo.Nos estamos acostumbrando tanto a las cosas que no están bien que el día que tengamos que enfrentarnos con ellas -yo creo que ya es hora- no sabremos.

Todo esto viene a cuento de la alevósica intención de entrar en la OTAN que el ministro de Asuntos Exteriores nos «adelantó» en su entrevista concedida al diario EL PAIS.

Porque no pensemos que eso de entrar en una organización militar sin que lo apoye nadie más que el partido del poder no es hacer las cosas bien. Si unos nos meten a su antojo, otros nos sacarán de la misma manera. Ni lo uno ni lo otro son algo serio./

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