Accidente en una central nuclear francesa

Francia estuvo a punto de sufrir un importante accidente nuclear cuando, esta semana, se averió el sistema de refrigeración del centro de reprocesamiento de La Hague, en el canal de la Mancha, según informó ayer, desde Amsterdam, el movimiento ecologista internacional Greenpeace.El incidente, que ha sido ocultado por las autoridades, ocurrió el martes por la mañana, al interrumpirse la corriente eléctrica que conduce hasta la central los 90.000 voltios que la hacen funcionar.

Un correcto funcionamiento eléctrico es vital para que marchen los motores que refrigeran continuamente los tanq...

Francia estuvo a punto de sufrir un importante accidente nuclear cuando, esta semana, se averió el sistema de refrigeración del centro de reprocesamiento de La Hague, en el canal de la Mancha, según informó ayer, desde Amsterdam, el movimiento ecologista internacional Greenpeace.El incidente, que ha sido ocultado por las autoridades, ocurrió el martes por la mañana, al interrumpirse la corriente eléctrica que conduce hasta la central los 90.000 voltios que la hacen funcionar.

Un correcto funcionamiento eléctrico es vital para que marchen los motores que refrigeran continuamente los tanques en los que se encuentran los desperdicios nucleares que se almacenan en el mencionado centro de reprocesamiento. Según el plan previsto, comenzaron a funcionar los generadores de emergencia. Pero fue entonces cuando se produjo un imprevisible error humano: la corriente eléctrica exterior fue restablecida mientras los generadores seguían en marcha.

Un exceso de tensión averió el transformador que convierte los 90.000 voltios que llegan a la central en los 15.000 que son necesarios para el funcionamiento del sistema.

Carentes de refrigeración, los tanques de almacenamiento de desperdicios comenzaron a sobrecalentarse, primer peldaño hacia una catástrofe, que se habría producido en algunas horas, cuando el vapor de agua contaminado lograra escaparse de los tanques y contaminar la atmósfera.

Fue ordenada la evacuación de todo el personal no imprescindible, y sólo con la llegada de nuevos generadores (transportados desde el puerto de Cherburgo) se pudo poner de nuevo en funcionamiento el sistema de refrigeración.