El Parlamento Foral debatirá la censura a Del Burgo el día 14

A pesar del intento de Jaime Ignacio del Burgo para que el Parlamento Foral de Navarra no celebrase sesión alguna en la que se debatieran las mociones presentadas en tomo al asunto FASA y que, en su mayoría, solicitan la dimisión del presidente de la Diputación Foral, el Pleno del Parlamento se reunirá el próximo día 14 con carácter extraordinario para debatir y someter a votación, si procede, las mociones sobre el tema FASA.

A una semana de la votación, en círculos de UCD de Navarra se ha asegurado a EL PAIS que Del Burgo tendrá que abandonar su cargo, «bien por decisión del Parlamento...

A pesar del intento de Jaime Ignacio del Burgo para que el Parlamento Foral de Navarra no celebrase sesión alguna en la que se debatieran las mociones presentadas en tomo al asunto FASA y que, en su mayoría, solicitan la dimisión del presidente de la Diputación Foral, el Pleno del Parlamento se reunirá el próximo día 14 con carácter extraordinario para debatir y someter a votación, si procede, las mociones sobre el tema FASA.

A una semana de la votación, en círculos de UCD de Navarra se ha asegurado a EL PAIS que Del Burgo tendrá que abandonar su cargo, «bien por decisión del Parlamento o porque así lo estime el partido».A través de un escrito dirigido a la mesa interina del Parlamento Foral, Jaime Ignacio del Burgo ha indicado que las mociones presentadas en la Cámara, en las que, excepto una, todas solicitan su inmediata dimisión, conculcan claramente su derecho al honor, a la propia imagen y a la presunción de inocencia, por lo que entiende que el Parlamento de Navarra no debe debatir este tema, ya que podría significar «una flagrante violación del ordenamiento jurídico». Según el presidente de la Diputación, «si alguien se atreve a formular acusaciones sobre el carácter presuntamente delictivo o desleal de mi actuación, debe hacerlo ante los tribunales de justicia». En consecuencia, Del Burgo considera que carecerá de valor moral y jurídico cualquier decisión que se adopte.

Por otro lado, Del Burgo ha advertido que, de acuerdo con la expresión acuñada por los antiguos moralistas para desautorizar los abusos del poder central, se obedece, pero no se cumple, tiene la seguridad de que «el presidente, democráticamente elegido, en la Diputación Foral de Navarra, no se verá en el trance de tener que recurrir a este viejo aforismo foral». De igual modo, Jaime Ignacio del Burgo, después de señalar que está dispuesto a defender su honor con todos los medios a su alcance, ha afirmado que el Parlamento Foral carece de competencia para formular mociones de censura y que cualquier actuación parlamentaria en este sentido carecería de eficacia jurídica.

Por su parte, el Parlamento Foral ha respondido a la carta de Del Burgo con el envío de un escrito al presidente de la Diputación en el que advierte que la Cámara no puede ser considerada como «un tribunal de honor ni de excepción ni se atribuye funciones que tan sólo competen a jueces y tribunales. Lo único que hace es llevar a término una tarea que le fue encomendada por todos los grupos parlamentarios sin excepción y que es práctica habitual en todo Parlamento crítico». De esta forma, la mesa interina del Parlamento entiende que tiene derecho a «emitir juicios de valor políticos sobre conductas públicas de cualquiera de sus parlamentarios que tengan relación directa, como en este caso, con la hacienda de Navarra».

En algunos círculos de UCD de Navarra, que hasta el momento han criticado la postura de Jaime Ignacio del Burgo en el asunto FASA, se ha asegurado a EL PAIS que el presidente de la Diputación tendrá que renunciar a su cargo de motu proprio, «ya que, de lo contrario, tendrá que intervenir el partido para tomar una decisión».