Cartas al director

Sa Carneiro, en TVE

Soy un portugués, de paso por España, que la otra noche tuve oportunidad de ver la entrevista concedida por Sa Carneiro, presidente del actual Gobierno portugués, a RTVE. Como portugués, me parece fantástico que Televisión Española dedique cerca de una hora de emisión a Portugal, y más aún a una hora de gran audiencia. Pero, también como portugués, me veo obligado a expresar mi protesta por la manera como lo hizo, tanto en la forma como en el fondo. De hecho, el pueblo español no recibió ninguna clase de información objetiva sobre la dura realidad que vive Portugal hoy por hoy. La entrevista f...

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Soy un portugués, de paso por España, que la otra noche tuve oportunidad de ver la entrevista concedida por Sa Carneiro, presidente del actual Gobierno portugués, a RTVE. Como portugués, me parece fantástico que Televisión Española dedique cerca de una hora de emisión a Portugal, y más aún a una hora de gran audiencia. Pero, también como portugués, me veo obligado a expresar mi protesta por la manera como lo hizo, tanto en la forma como en el fondo. De hecho, el pueblo español no recibió ninguna clase de información objetiva sobre la dura realidad que vive Portugal hoy por hoy. La entrevista fue una bochornosa manifestación de propaganda partidista y de promoción personal de un señor que se despachó a gusto sobre la temática más variada, aprovechando, con desparpajo y soltura, la oportunidad que se le ofrecía para vender su mercancía. Aunque a lo largo de la emisión se dijera, en varias ocasiones y por el entrevistador, que Sa Carneiro contaba con el apoyo de la mayoría del pueblo portugués, tengo que decir que tal mayoría solamente es parlamentaria, ya que en realidad la derecha obtuvo el 46,47% de los votos, frente a un 50,81% de la izquierda. Si en estos momentos en Portugal tenemos un Gobierno de la Alianza Democrática del señor Sa Carneiro es debido sencillamente a la ley D'Hont, que posibilita una gran mayoría parlamentaria a los partidos que no obtuvieron su equivalente en votos. Todo ello fue silenciado por Televisión Española, Y el pueblo español fue «conducido» por una pista falsa. Incompetencia, ignorancia, mala fe? Eso es algo que tendrán que juzgar los propios españoles.

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