Primera aparición pública del presidente afgano

Babrak Karmal, presidente de la República y del Consejo Revolucionario de Afganistán, anunció ayer, en su primera aparición pública en Kabul, que su país «luchará resueltamente contra el imperialismo, codo con codo con la Unión Soviética». Por su parte dirigentes de cinco grupos guerrilleros, que luchan contra el nuevo régimen, se reunieron en la ciudad paquistaní de Peshawar, con objeto de unificar sus fuerzas contra el régimen de Karmal.Tropas soviéticas se concentraron ayer en la ciudad oriental de Jalalabad, en lo que se presume que sea el inicio de una gran ofensiva de invierno contra los...

Babrak Karmal, presidente de la República y del Consejo Revolucionario de Afganistán, anunció ayer, en su primera aparición pública en Kabul, que su país «luchará resueltamente contra el imperialismo, codo con codo con la Unión Soviética». Por su parte dirigentes de cinco grupos guerrilleros, que luchan contra el nuevo régimen, se reunieron en la ciudad paquistaní de Peshawar, con objeto de unificar sus fuerzas contra el régimen de Karmal.Tropas soviéticas se concentraron ayer en la ciudad oriental de Jalalabad, en lo que se presume que sea el inicio de una gran ofensiva de invierno contra los guerrilleros, que han visto nutridas sus filas con desertores procedentes del Ejército afgano.

La frontera afgano-paquistaní se encontraba ayer despejada y libre al tránsito, y los combate fueron encarnizados en la ciudad de Herat, próxima a la frontera con Irán. donde las guerrillas s adueñaron de esta localidad, que permanece cercada por tropas soviéticas. En esta ciudad se registró una sublevación contra el derrocado Hafizullali Amin durante la primavera del año pasado, que terminó en un baño de sangre.

Los combates se extendieron también a las ciudades de Badarskhan y Tahkar, próximas a la frontera afgano-soviética, según fuentes guerrilleras. Las mismas fuentes señalaron que en un punto próximo a Gardez, en la provincia de Paktiar, una columna de carros de combate soviéticos cayó en una emboscada de los guerrilleros. El lugar fue escenarios de duros combates.

La calma volvió a reinar ayer en Kabul, donde por primera vez desde el golpe se autorizó la entrada de periodistas occidentales. Patrullas de soldados soviéticos vigilan algunas zonas de la ciudad, según revelaron viajeros procedentes de la capital afgana llegados ayer a Nueva Delhi.

Por primera vez desde que se inició el golpe, el pasado 27 de diciembre. Babrak Karmal apareció en público en Kabul y agradeció la presencia de las tropas ,soviéticas -cifradas en 40.000 soldados- en Afganistán. El nuevo dirigente afgano prometióla liberación de detenidos políticos, libertad religiosa y respeto a las tradiciones islámicas observa das en el país. Además de calificar al depuesto Hafizullali Amin, muerto en las primeras horas del golpe, como agente del imperialismo norteamericano, Karmal condenó la campaña mundial de protestas contra la intervención soviética en su país.

Los intentos de unificar la lucha guerrillera contra el nuevo régimen y contra las tropas soviéticas que combaten junto a él tropiezan con dificultades dado el fraccionamiento entre unas organizaciones y otras. Algunos grupos, como el Hezbe Islami, han permanecido al margen de estos contactos, ya que el principal aglutinante de la unión, la alianza Paiman-i-ltehade Islami se muestra dispuesta a aceptar al depuesto monarca Zahir Sha como líder de las fuerzas anticomunistas. El ex rey afgano, derrocado en 1973 por el también depuesto Mohamed Daud, exhortó desde Roma a los guerrilleros refugiados en Peshawar para que olviden sus diferencias y se unan cuanto antes.