La AFE propone una notable reducción del consumo energético en Occidente

La Agencia Internacional de Energía (AIE) espera alcanzar un acuerdo en su próxima reunión, a nivel de ministros de Energía, los días 9 y 10 de diciembre, por el que los veinte países miembros se comprometen a reducir su consumo petrolífero en veinticuatro millones de barriles diarios durante el año 1980. La reunión de la AIE tendrá lugar en París, precisamente una semana antes de que los países englobados en la OPEP inicien su conferencia ordinaria semestral en Caracas, durante la que se establecerá teóricamente una nueva estructura de precios de los crudos para los próximos seis meses. Un po...

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La Agencia Internacional de Energía (AIE) espera alcanzar un acuerdo en su próxima reunión, a nivel de ministros de Energía, los días 9 y 10 de diciembre, por el que los veinte países miembros se comprometen a reducir su consumo petrolífero en veinticuatro millones de barriles diarios durante el año 1980. La reunión de la AIE tendrá lugar en París, precisamente una semana antes de que los países englobados en la OPEP inicien su conferencia ordinaria semestral en Caracas, durante la que se establecerá teóricamente una nueva estructura de precios de los crudos para los próximos seis meses. Un portavoz de la AIE anunció ayer en París que la reunión del próximo lunes ratificará el acuerdo alcanzado el pasado domingo por un equipo, de expertos de la agencia. Este acuerdo prevé la reducción de la demanda petrolífera en veinticuatro millones de barriles al día durante todo el año 1980, techo que la AIE espera que se mantenga hasta 1985.Pese a este acuerdo de principio, que, de ratificarse, sería la primera vez que los veinte miembros de la AIE (los más desarrollados del mundo occidental) acuerdan reducir su consumo e importación petrolífera, el Gobierno norteamericano ha hecho público oficiosamente su propio plan de reducción de consumo que, a simple vista, se diferencia del acordado por la comisión técnica en la fórmula y método por el que se debe alcanzar dicho objetivo.

La novedad del plan norteamericano es, precisamente, la introducción de sanciones a los países que violen los límites establecidos, extremo que, a juicio de los expertos, revela que muchos de los objetivos de la cumbre de Tokio el pasado verano no se han alcanzado.

La Comunidad Económica Europea, sin embargo, reaccionó ayer rápidamente al plan de Washington, y, después del Consejo de Ministros de energía de los nueve, celebrado ayer en Bruselas, hizo público los cupos individuales de consumo por país para el año 1980. Según el acuerdo, los 472 millones de toneladas de petróleo de los nueve de la CEE importarán el próximo año se distribuirán de la siguiente manera: Bélgica (treinta millones de toneladas), Dinamarca (16,5 millones), RFA (143 millones), Francia ( 117), Irlanda (6,5), Italia (103,5), Luxemburgo (1,5), Holanda (42) y Gran Bretaña (doce).

En el Consejo, los nueve ministros de Energía estudiaron la propuesta norteamericana de reducir el consumo de acuerdo a su plan, pero al final de la reunión no hubo ninguna reacción ni comentario oficial al mismo. Asimismo, se estudió una propuesta similar de la República Federal de Alemania, que establece un complicado sistema de control.

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