Cartas al director

"No tiene nada" y muere de meningitis

Leí con gran atención la carta de Enrique Velasco (EL PAIS, 30 de mayo), sintiéndome completamente identificado con él y pensando que eso mismo deberíamos haber hecho nosotros; pero lo que me causa profunda indignación es que el señor Cabeza Bosque afirme de forma tan categórica no ser ciertas las acusaciones del señor Velasco, cuando él debe saber que es norma en la Ciudad Sanitaria La Paz no observar a ningún paciente que ellos consideren que no es de su zona.El día 29 de junio de 1978 nos presentamos con mi sobrina en dicha residencia. Después de observar que no respondía al tratamiento méd...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Leí con gran atención la carta de Enrique Velasco (EL PAIS, 30 de mayo), sintiéndome completamente identificado con él y pensando que eso mismo deberíamos haber hecho nosotros; pero lo que me causa profunda indignación es que el señor Cabeza Bosque afirme de forma tan categórica no ser ciertas las acusaciones del señor Velasco, cuando él debe saber que es norma en la Ciudad Sanitaria La Paz no observar a ningún paciente que ellos consideren que no es de su zona.El día 29 de junio de 1978 nos presentamos con mi sobrina en dicha residencia. Después de observar que no respondía al tratamiento médico administrado por su médico de cabecera, se nos dijo (después de estar esperando más de una hora en una sala con niños llorando, con heridas, etcétera, mientras médicos y enfermeras mantenían en el interior una tertulia) que no nos podían atender por no ser de su zona. Ante los ruegos de mi cuñado, el jefe de urgencias le dijo que además estaba claro que esa niña no tenía nada. De allí nos mandaron al Niño Jesús. En dicho hospital, había otras personas a las que, según nos dijeron, no habían querido atender en La Paz. Mi sobrina entraba en coma la noche del sábado 1 de julio, y falleció el 10 del mismo mes, de meningitis.

Porque, según eljefe del servicio de urgencias de la Ciudad Sanitaria La Paz, que no nos quiso atender, estaba claro que esa niña no tenía nada.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Archivado En