Tensión en sectores militares respecto a Martín Villa

La Junta de Jefes de Estado Mayor trasladó ayer al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, el malestar de algunos sectores del Ejército ante supuestos comentarios del ministro del Interior, Rodolfo Martin Villa, sobre la actitud de las esposas de oficiales en los funerales por el general Ortín, según pudo saber EL PAIS en medios cercanos al presidente.

La reunión de los, jefes de Estado Mayor con el ministro de Defensa. teniente general Gutiérrez Mellado, se inició sobre las once y media de la mañana de ayer en las dependencias del Ministerio, y el señor Suárez se trasladó desde su desp...

La Junta de Jefes de Estado Mayor trasladó ayer al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, el malestar de algunos sectores del Ejército ante supuestos comentarios del ministro del Interior, Rodolfo Martin Villa, sobre la actitud de las esposas de oficiales en los funerales por el general Ortín, según pudo saber EL PAIS en medios cercanos al presidente.

La reunión de los, jefes de Estado Mayor con el ministro de Defensa. teniente general Gutiérrez Mellado, se inició sobre las once y media de la mañana de ayer en las dependencias del Ministerio, y el señor Suárez se trasladó desde su despacho para asistir a aquélla. Este hecho ha sido calificado como «significativo» - por las mismas fuentes.Se sabe que el señor Suárez permaneció reunido con los altos militares durante toda la mañana y que la sesión concluyó sobre las dos de la tarde. La impresión dominante es que se trató de la situación del orden público y que algunos de los temas tratados pudieron serlo ya el viernes, en la sesión que celebró el Consejo Superior del Ejército.

Este organismo, que preside el jefe del Estado Mayor del Ejército, teniente general Liniers, e integran los capitanes generales de las distintas regiones, tuvo una «larga duración». si bien en fuentes oficiales se asegura que se trataba de una reunión ordinaria.

Dado el carácter secreto de sus deliberaciones es arriesgado cualquier conjetura sobre lo tratado. Sin Embargo. fuentes solventes aseguraron a EL PAIS que si se abordaron los supuestos comentarios del señor Martín Villa, sería de forma marginal. «Los análisis del Consejo Superior del Ejército -dijeron- son serios, y una valoración objetiva de la realidad muestra que, pese al número de asesinatos, la respuesta al terrorismo ha mejorado notablemente en los dos Últimos meses.»

Como siempre que se agudizan los conflictos terroristas, se multiplican los rumores que tratan de involucrar a sectores o personalidades del Ejército con supuestas actitudes políticas. De esta forma, ayer se insistió en que organismos o grupos militares podrían haber solicitado la dimisión del propio presidente Suárez. Fuentes autorizadas de Presidencia respondieron a este comentarlo en el sentido d que «ni a ningún órgano militar se le ocurriría tal cosa, ni se toleraría.»

La impresión dominante es que la tensión existe en sectores del Ejército y de las Fuerzas de Orden Público, tanto respecto del ministro del Interior, como del de Defensa. Pero también existe coincidencia en medios cualificados -tanto Políticos como militares-, a la hora de juzgar conio absolutamente improbable el cese del senor Martín-Villa.

Fuentes gubernamentales comentaron a EL PAIS que el señor Martín Villa se mostraba a última hora de la mañana de ayer «bajo de moral» por los asesinatos del día, pero en absoluto dispuesto a abandonar el barco, pese a que «la presión a que está sometido es increíble».

Una alta personalidad rnilitar con responsabilidades en rnateria de orden público, comentó a EL PAIS que la situación es indudablemente tensa y que hay que esperar un mes y medio muy difícil hasta el 1 de marzo, fecha de las elecciones. «Ocurre -añadió- que muchos ciudadanos desearían tener el orden de la Unión Soviética y las libertades de Estados Unidos, y eso es muy difícil.»

Sobre la situación del ministro del Interior, comentó que su cese significaría «cumplir con el propósito del enemigo, porque parece claro que uno de los objetivos del proceso terrorista es desestabilizar al ministro».

«En una fase tan aguda de la batalla -añadió- no se puede camblar el dispositivo, porque sería necesario un superman que en quince días se impusiera en los temas políticos, los de orden público y los de terrorismo. No es posible cambiar las previsiones en este momento.»

Distintas fuentes coincidieron en calificar de «rumores interesados» la mayoría de los que circulan, y relacionan actitudes políticas con posturas militares. «Se intenta -comentaron fuentes militares- de sembrar miedo y tratar de radicalizar votos hacía zonas que no interesan al conjunto del país.»