La Constitución española, vista en el exterior como un signo de reconciliación

Todos los grandes medios de información mundiales han destacado la aprobación por las dos Cámaras de las Cortes españolas del proyecto de constitución que el próximo diciembre será sometido a referéndum del pueblo español. Especialmente, se destaca en el extranjero que la nueva Constitución española es un texto de concordia, que puede cerrar definitivamente las diferencias entre los españoles. Asimismo, se destaca que se constituye un Estado social de derecho, con una Monarquía parlamentaria, y que se garantizan todos los grandes derechos ciudadanos que recogen las constituciones democráticas,...

Todos los grandes medios de información mundiales han destacado la aprobación por las dos Cámaras de las Cortes españolas del proyecto de constitución que el próximo diciembre será sometido a referéndum del pueblo español. Especialmente, se destaca en el extranjero que la nueva Constitución española es un texto de concordia, que puede cerrar definitivamente las diferencias entre los españoles. Asimismo, se destaca que se constituye un Estado social de derecho, con una Monarquía parlamentaria, y que se garantizan todos los grandes derechos ciudadanos que recogen las constituciones democráticas, así como el autogobierno de nacionalidades y regiones.

Todos los diarios británicos de difusión nacional se hacen eco de la aprobación de la Constitución española en la que consideran una «jornada histórica». Los rotativos londinenses, desde el derechista Daily Telegraph hasta el liberal Guardian, coinciden en anteponer, por encima de cualquier otro, el carácter de entierro de cuarenta años de dictadura que apareja el nuevo texto constitucional.En crónicas de sus corresponsales en Madrid, los periódicos dé la capital británica destacan el apoyo abrumador que el texto la conseguido en ambas Cámaras y subrayan la anécdota del voto negativo de un puñado de parlamentarios derechistas. Para los observadores ingleses, que ponen el énfasis en la abstención de los representantes vascos, los dos peligros inminentes de la andadura española hacia una plena democracia parlamentaria de corte occidental se concretan en la respuesta refrendataria que la Constitución pueda encontrar entre el pueblo vasco y en la persistencia de la violencia política.

El Financial Times, portavoz de los medios económicos y único matutino que alcanza a incluir un comentario editorial, considera que el respeto por los derechos humanos que refleja el nuevo texto fundamental, junto con el limitado papel que en él se asigna al Rey, hacen de la Constitución española un mojón histórico.