La URSS contempla con escepticismo la reuinón de los grandes
La Unión Soviética interpreta el viaje del presidente norteamericano. Carter, a Bonn como un intento de reforzar a los países occidentales en la «grave crisis económica que sufren y de la que no les será fácil salir». La agencia soviética Tass mantiene su pesimismo sobre la capacidad de estos países para resolver los graves problemas que se estudiarán estos días en la capital de la República Federal de Alemania.Para emitir su pesimista informe la agencia soviética se fía de los comentarios aparecidos en las últimas semanas en la prensa occidental. Recoge de los principales periód...
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La Unión Soviética interpreta el viaje del presidente norteamericano. Carter, a Bonn como un intento de reforzar a los países occidentales en la «grave crisis económica que sufren y de la que no les será fácil salir». La agencia soviética Tass mantiene su pesimismo sobre la capacidad de estos países para resolver los graves problemas que se estudiarán estos días en la capital de la República Federal de Alemania.Para emitir su pesimista informe la agencia soviética se fía de los comentarios aparecidos en las últimas semanas en la prensa occidental. Recoge de los principales periódicos europeos el ambiente de crisis económica que sufre «el mundo capitalista» y la difícil situación por la que pasan actualmente los países del Mercado Común. Estados Unidos y Japón. Los soviéticos se muestran negativos en cuanto al resultado de las conversaciones de Bonn, y señalan que si bien en las tres conversaciones anteriores no hubo una solución práctica, en esta cuarta tampoco parece que exista el clima propicio.
La inflación, cuyas cifras se expresan detalladamente por países. y el Aumento de desempleo son los dos puntos en los que la información soviética acentúa su pesimismo y señala que «seis millones de trabajadores cobran en Estados Unidos».
La solución que considera más viable el comentarista soviético es la búsqueda de «ventajas comerciales» y el apoyo en el proteccionismo, que puede dar a los países occidentales una posibilidad para salir de los graves problemas económicos que en estos momentos no parece tener salida clara.