Juicio contra el presunto ladrón de la Cámara Santa de Oviedo

A las once de la mañana de hoy dará comienzo en la sala primera de la Audiencia provincial de Oviedo el juicio oral contra José Domínguez Saavedra, presunto autor del robo de la Cámara Santa, ocurrido en la madrugada del 11 de agosto de 1977. El señor Domínguez Saavedra fue detenido en Oporto el 13 de septiembre, donde permaneció preso hasta su extradición. La petición fiscales de dieciocho años, dos meses y un día de reclusión menor y una indemnización de 260,000 pesetas por los daños causados al cabildo de la catedral, mil por el dinero robado de los cepillos, cuatrocientos del importe de la...

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A las once de la mañana de hoy dará comienzo en la sala primera de la Audiencia provincial de Oviedo el juicio oral contra José Domínguez Saavedra, presunto autor del robo de la Cámara Santa, ocurrido en la madrugada del 11 de agosto de 1977. El señor Domínguez Saavedra fue detenido en Oporto el 13 de septiembre, donde permaneció preso hasta su extradición. La petición fiscales de dieciocho años, dos meses y un día de reclusión menor y una indemnización de 260,000 pesetas por los daños causados al cabildo de la catedral, mil por el dinero robado de los cepillos, cuatrocientos del importe de la recaudación por las visitas obtenidas en aquella jornada en la Cámara Santa y dos millones y medio por la reposición de las piedras y el oro no recuperados y la restauración de las joyas (Cruz de la Victoria, Cruz de Pelayo y Caja de las Agatas).El 11 de agosto pasado las mujeres encargadas de la limpieza de la catedral advirtieron por la mañana síntomas de violencia en la sacristía donde se encuentra la caja fuerte. La noticia se extendió como reguero de pólvora por toda Asturias: la Cámara Santa había sido saqueada.

La fantasía originó todo tipo de interpretaciones y los comunicados de supuestos comandos llegaron por decenas a la prensa asturiana. Luego todo quedó en que un simple ratero había sido el autor de lo que se llamó el robo del siglo en Asturias. Al parecer, José Domínguez Saavedra, que posteriormente afirmó no haber oído hablar nunca de la Cámara Santa, después de desvalijar algunos cepillos, forzó la puerta de acceso a la Cámara Santa con un gancho. Allí destrozó las joyas, que son los símbolos de la historia de Asturias y despojó la Cruz de los Ángeles, la Cruz de Pelayo y la Caja de las Agatas de sus láminas de oro y sus piedras preciosas.

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