Los militares bolivianos dieron la orden de rematar al "Che" Guevara
El legendario guerrillero Ernesto «Che» Guevara fue muerto por orden superior de las fuerzas armadas de Bolivia, reveló ayer el ex presidente de la República general Alfredo Ovando.
En una conferencia de prensa el ex dignatario confirmó, por vez primera, que la orden para matar a Guevara el 8 de octubre de 1967 surgió de la cúpula castrense.Ovando, de 62 años, desempeñaba en 1967 las funciones de comandante en jefe de las fuerzas armadas de Bolivia.
El ex presidente gobernó Bolivia entre 1969 y 1970, y tras su derrotamiento se radicó en Madrid. La semana pasada retornó a La P...
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El legendario guerrillero Ernesto «Che» Guevara fue muerto por orden superior de las fuerzas armadas de Bolivia, reveló ayer el ex presidente de la República general Alfredo Ovando.
En una conferencia de prensa el ex dignatario confirmó, por vez primera, que la orden para matar a Guevara el 8 de octubre de 1967 surgió de la cúpula castrense.Ovando, de 62 años, desempeñaba en 1967 las funciones de comandante en jefe de las fuerzas armadas de Bolivia.
El ex presidente gobernó Bolivia entre 1969 y 1970, y tras su derrotamiento se radicó en Madrid. La semana pasada retornó a La Paz, tras acogerse a la amnistía general dictada por el régimen del general Hugo Banzer en enero de este año.
«Saludos a papá» fue la clave para dar fin a la vida del «Che». Guevara cayó herido en la quebrada del Churo, en el sureste boliviano, el 7 de octubre. En la madrugada del 8 de octubre, el sargento del ejército de apellido Terán ejecutó al jefe guerrillero.
La muerte del «Che» cerró uno de los episodios más contradictorios de la historia actual latinoamericana. Guevara tenía la intención de repetir en el continente la hazaña de la Sierra Maestra cubana.
Pese a la insistencia de la prensa local, se resistió a revelar quiénes decidieron sobre la vida del jefe guerrillero. «Toda la documentación está en manos de las fuerzas armadas», repitió ante los requerimientos de la prensa.
Según testimonios recogidos por varios ensayistas e historiadores, el entonces presidente, René Barrientos, el general Ovando y la cúpula castrense decidieron que Guevara debía ser ultimado a balazos.
En la conferencia de prensa, el ex presidente Ovando acusó a la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de ser responsable de su derrocamiento en 1970.