Nueva reunión comunitaria para fijar los precios agrícolas

Los ministros de Agricultura de los nueve países de la CEE, se encuentran reunidos en el edificio Charlemagne, en Bruselas, para intentar, luna vez más, solucionar el problema de la aprobación de los precios agrícolas comunitarios, de la campaña 1978/79, iniciada desde el pasado 21 de abril.Otros temas, además de los precios, dividen a los nueve, en su actual sesión. Se trata de la ayuda a las regiones mediterráneas de la CEE (M¡di francés y Mezziogiorno italiano), el sector vitivinícola y las diferencias monetarias entre países, que ponen en peligro la organización común de merc...

Los ministros de Agricultura de los nueve países de la CEE, se encuentran reunidos en el edificio Charlemagne, en Bruselas, para intentar, luna vez más, solucionar el problema de la aprobación de los precios agrícolas comunitarios, de la campaña 1978/79, iniciada desde el pasado 21 de abril.Otros temas, además de los precios, dividen a los nueve, en su actual sesión. Se trata de la ayuda a las regiones mediterráneas de la CEE (M¡di francés y Mezziogiorno italiano), el sector vitivinícola y las diferencias monetarias entre países, que ponen en peligro la organización común de mercado, basada en una misma «unidad de cuenta».

Todos los observadores coinciden en afirmar que la política mediterránea es el núcleo de las diferencias entre ministros. En definitiva, todo se basa en que la República Federal de Alemania no accede a sobrecargar el presupuesto común de la Europa Verde, con otros mil millones de «unidades de cuenta» (100.000 millones de pesetas) destinados a reformar las estructuras agrícolas mediterráneas de la CEE, en un plazo de cinco años.

Francia e Italia forman un frente común ante sus reivindicaciones financieras. Sobre todo frente a la perspectiva de ampliación del Mercado Común.

Si no hay acuerdo previo para reestructurar el agro mediterráneo, los Gobiernos de París y Roma, no aceptan ningún compromiso en materia de nuevos precios agrícolas. Punto, este último, en el que también los nueve están divididos. Francia, Italia, Gran Bretaña e Irlanda son partidarios de un aumento moderador (2,5%), mientras que la República Federal de Alemania, Bélgica, Holanda, Luxemburgo y Dinamarca, quieren incrementos del orden del 3 al 5%, según países. La comisión propone una subida media del 2,2%.