La primera, en la frente
Madrid: Indice general, 98,83 (-1,17)Volumen nominal contratado: 114 millones de pesetas
Suben, 14; bajan, 49; repiten, 54
La primera jornada bursátil del año empezó como ya es habitual, con una sensible caída de las cotizaciones. En las tres bolsas se perdió más de un punto en la sesión, y al abono de dividendo en numerosas sociedades ha seguido una pérdida con creces del mismo en los cambios.Ningún sector se ha salvado de la quema, aunque haya sido el eléctrico uno de los más castigados. Pasada la alegría de las últimas jornadas del año, en que los compradores aparecen con obje...
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Madrid: Indice general, 98,83 (-1,17)Volumen nominal contratado: 114 millones de pesetas
Suben, 14; bajan, 49; repiten, 54
La primera jornada bursátil del año empezó como ya es habitual, con una sensible caída de las cotizaciones. En las tres bolsas se perdió más de un punto en la sesión, y al abono de dividendo en numerosas sociedades ha seguido una pérdida con creces del mismo en los cambios.Ningún sector se ha salvado de la quema, aunque haya sido el eléctrico uno de los más castigados. Pasada la alegría de las últimas jornadas del año, en que los compradores aparecen con objeto de conseguir la desgravación fiscal correspondiente para la próxima liquidación del impuesto general sobre la renta, los títulos eléctricos han sufrido una baja notable.
Los demás grupos, bancario, químico, construcción han sufrido también bajas generales en casi todos los valores y algunos no llegaron a operar. El año, pues, comienza mal, como era de esperar.
Nada indica que el ejercicio de las sociedades vaya a ser mejor que el pasado, y si alguien no lo remedia lo lógico es que las cotizaciones sigan batiendo récords por lo bajo.
Para hoy la sesión quedó mal. Seguirán las pérdidas por falta de compradores y éstos, previsiblemente, no aparecerán más que en momentos en que se recomiende una reacción técnica por parte de las instituciones. Lo único que puede evitar el desmerecimiento es que la gente se canse de vender y decida aguantar hasta que lleguen tiempos más animados.