La Mesa del Congreso, expulsada de la reunión de la Junta de Portavoces

La guerra parlamentaria entre Unión de Centro Democrático (UCD) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) estalló abiertamente ayer tarde en la Junta de Portavoces del Congreso de Diputados, de la que, a solicitud del partido gubernamental, fueron expulsados los miembros de la Mesa.

Unas palabras del vicepresidente primero del Congreso, Luis Gómez Llorente (PSOE), sobre la conveniencia de tratar en el próximo Pleno los sucesos de Tenerife, deseo que en caso de no ser aceptado sería planteado como rectificación al orden del día, actuó como detonante. El portavoz de UCD, José Pedro Pé...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La guerra parlamentaria entre Unión de Centro Democrático (UCD) y el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) estalló abiertamente ayer tarde en la Junta de Portavoces del Congreso de Diputados, de la que, a solicitud del partido gubernamental, fueron expulsados los miembros de la Mesa.

Unas palabras del vicepresidente primero del Congreso, Luis Gómez Llorente (PSOE), sobre la conveniencia de tratar en el próximo Pleno los sucesos de Tenerife, deseo que en caso de no ser aceptado sería planteado como rectificación al orden del día, actuó como detonante. El portavoz de UCD, José Pedro Pérez Llorca, pidió que se leyera el precepto reglamentario según el cual la Junta de Portavoces la integran sólo el presidente de la Cámara y los portavoces de los grupos. En virtud de tal artículo, el 27, los miembros de la Mesa hubieron de abandonar la reunión, reglamentariamente expulsados.La Junta de Portavoces se reunió ayer tarde para estudiar el desarrollo del Pleno que iniciará el Congreso el próximo día 22, y en el que, como ya se informó la semana pasada, la constitución de una comisión investigadora sobre los sucesos de Málaga quedó relegada a un tercer término, tras la aprobación de los Presupuestos del Estado y el estudio de una serie de interpelaciones, de modo que la constitución de tal comisión no podría producirse normalmente antes del día 10 de enero, en la continuación del Pleno que comenzará los días 22 y 23.

El primero en abandonar la sesión fue el secretario Rafael Escuredo (PSOE), quien, con aspecto nervioso, se dirigió a los periodistas que aguardábamos el término de la reunión para manifestamos que los miembros de la Mesa, que habían asistido tradicionalmente a la Junta de Portavoces, habían sido expulsados a propuesta de los representantes del Gobierno, en función del reglamento.

El señor Escuredo continuó diciendo que se trataba de una cuestión de lucha política, suscitada por la intervención del señor Gómez Llorente -vicepresidente primero del Congreso-, y señaló que en anteriores ocasiones los miembros de la Mesa, y de forma particular el ucedista Jesús Esperabé de Arteaga, habían hecho uso de la palabra durante las reuniones de la Junta de Portavoces sin que ningún grupo parlamentario hubiera recurrido al reglamento.

Por lo que se refiere a los secretarios de la Mesa, José Luis Ruiz Navarro y Francisco Soler (ambos de UCD), el primero de ellos señaló que si su propio partido les pedía que se fueran, no tenían más remedio que irse, si bien aseguró que la cuestión no había sido previamente estudiada por ellos. Por su parte, el señor Soler señaló que los miembros de la Mesa no pueden asistir para emitir juicios de valor, y añadió que para el funcionamiento de las instituciones parlamentarias es importante que se respeten a fondo las deliberaciones que son secretas.

Este criterio fue objetado por el secretario señor Escuredo (PSOE), quien manifestó que las deliberaciones reglamentariamente no tienen por qué ser secretas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Juicio político de Gómez Llorente

El protagonista del incidente -el vicepresidente primero del Congreso de Diputados, Luis Gómez Llorente- explicó a los informadores, con més serenidad, que, en efecto, el precepto reglamentario alegado señala que la Junta de Portavoces está integrada sólo por el presidente y los portavoces. Añadió que, en cambio, la presencia de los miembros de la Mesa en las reuniones de la Junta de Portavoces no era ociosa ni gratuita, sino que se basaba en que durante las reuniones citadas se establece el orden del día y las líneas básicas del desarrollo de las sesiones, especialmente las plenarias.

Por lo que concieme al propio señor Gómez Llorente, manifestó que siendo él vicepresidente primero debía conocer el, planteamiento de fondo que se realiza durante la sesión, entre otras cosas para el caso de tener que sustituir al presidente, ya que es conveniente que quien preside una reunión conozca de qué se ha tratado en ella desde un principio. Recordó que en sesiones anteriores el vicepresidente señor Esperabé había intervenido en el debate con juicios incisivos que no habían sido estorbados por nadie.

Sobre la cuestión de fondo, el señor Gómez Llorente señaló que no tenía nada que rectificar sobre lo planteado dentro de la reunión. Explicó que lo que él había expuesto ante la Junta de Portavoces era que si el orden del día definitivo del próximo Pleno del Congreso de Diputdos no trataba temas como el de Tenerife, tales cuestiones iban a tratarse de nuevo, ya que se plantearían como una rectificación al orden del día al comienzo de la sesión.

A preguntas de los informadores, los miembros de la Mesa expulsados de la reunión de la Junta de Portavoces señalaron que algunos de los diputados asistentes a ella, entre ellos el señor Tamames (PCE), habían intentado mediar para que se resolviera el problema sin éxito.

Archivado En