Frialdad del PC italiano ante la visita del dirigente comunista español

El secretario del Partido Comunista español (PCE), Santiago Carrillo, se entrevista esta tarde con el líder comunista italiano Enrico Berlinguer, al cabo de su visita a Belgrado. Ambos dirigentes ofrecerán una rueda de prensa conjunta en la sede del Partido Comunista italiano.

El «caso Carrillo» fue acogido en un primer momento con laconismo. por Berlinguer, quien a su retorno de Moscú se declaró sorprendido, sólo informado de lo ocurrido por el propio Carrillo, a quien por casualidad había visto aquella mañana en un supermercado.

Al laconismo siguió la frialdad. Como dicen l...

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El secretario del Partido Comunista español (PCE), Santiago Carrillo, se entrevista esta tarde con el líder comunista italiano Enrico Berlinguer, al cabo de su visita a Belgrado. Ambos dirigentes ofrecerán una rueda de prensa conjunta en la sede del Partido Comunista italiano.

El «caso Carrillo» fue acogido en un primer momento con laconismo. por Berlinguer, quien a su retorno de Moscú se declaró sorprendido, sólo informado de lo ocurrido por el propio Carrillo, a quien por casualidad había visto aquella mañana en un supermercado.

Al laconismo siguió la frialdad. Como dicen los italianos, hubieran preferido que no se agitaran tanto las aguas. El responsable de la política internacional de la secretaría comunista, Giancarlo Pajetta, que acaba de efectuar una visita a Argelia, definió recientemente a Carrillo como un «temperamento ibérico» y un sentimental «de la política internacional» durante una recepción de la embajada española.

De la frialdad, sin embargo, se pasa ahora a una consulta y participación conjunta en una conferencia de prensa que sabe más a gesto de cortesía. Berlinguer, para evitar cábalas y deformaciones, habría preferido que Carrillo informase directamente a la prensa. Nadie en Italia ha aceptado las "excusas burocráticas" dadas por los soviéticos a Carrillo, pero tampoco conviene, según Berlinguer, darle al eurocomunismo un tono excesivo o la aureola épica que gusta a Carrillo.

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