Clausura de los congresos de los comunistas catalanes y vascos

Ormazábal: "Siempre hemos sido un partido nacional vasco"

Un mitin en el pabellón de deportes de Bilbao, con asistencia de unas 3.000 personas y la presencia de Simón Sánchez Montero y Santiago Alvarez, cerró ayer tarde este tercer congreso del PC de Euskadi. El nuevo presidente, Ramón Ormazábal negó que en el partido existiese una corriente «nacionalista», para afirmar a continuación que se trataba de una «corriente cultural, una sensibilidad diferente ante la realidad nacional». Añadiría luego que la existencia de tales contrastes contribuye al enriquecimiento teórico del partido.El hecho de que los tres miembros revocados del comité ejecutivo haya...

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Un mitin en el pabellón de deportes de Bilbao, con asistencia de unas 3.000 personas y la presencia de Simón Sánchez Montero y Santiago Alvarez, cerró ayer tarde este tercer congreso del PC de Euskadi. El nuevo presidente, Ramón Ormazábal negó que en el partido existiese una corriente «nacionalista», para afirmar a continuación que se trataba de una «corriente cultural, una sensibilidad diferente ante la realidad nacional». Añadiría luego que la existencia de tales contrastes contribuye al enriquecimiento teórico del partido.El hecho de que los tres miembros revocados del comité ejecutivo hayan participado en la elaboración del libro Eurocomunismo y Euskadi era debida a la escasa relevancia de su trabajo ejecutivo, mientras que se consideraba muy importante su aportación teórica. Por eso se ha preferido que se dediquen al frente cultural que se trata de potenciar.

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El señor Ormazábal subrayó también que el PC de Euskadi ha sido siempre un partido nacional vasco, «aunque no nacionalista», y que en su haber tenía el mérito de haber llevado a la clase obrera en los años treinta la conciencia de la liberación nacional.

El nuevo secretario general, Roberto Lerchundi, antiguo militante de ETA, dijo sobre el papel de esta organización que había desarrollado una misión importante en latoma de conciencia nacional del pueblo vasco y que considera positivos los movimientos de masa surgidos de su seno, como es el caso de ElA, pero que «no tiene justificación el mantenimiento de grupos armados al margen y a veces enfrente de los movimieptos de masas, ya que es sólo un elemento de desestabilización. La actividad armada debe ser desautorizada hoy por todos los partidos democráticos, porque contribuye únicamente a la involución».

Respecto a las relaciones con la izquierda abertzale reconoció que hay serios enfrentamientos en los terrenos de los principios y los ha habido en el de la actuación, si bien «es necesario intensificar el diálogo». Finalmente y respecto a las elecciones municipales declaró que el PC de Euskadi está a favor de candidaturas de unidad democrática.

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