Adelpha pide la dimisión del Consejo del Patrimonio Nacional

La Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico (Adelpha) ha hecho pública una declaración sobre el Patrimonio Nacional, en la que concluye pidiendo la dimisión «inexcusable e inmediata» del Consejo y del resto del equipo rector del Patrimonio Nacional.Este hecho es considerado por la citada asociación como necesariamente previo a cualquier estudio riguroso del patrimonio y su situación. Con todo, Adelpha hace públicos sus criterios globales en torno al Patrimonio. Consideran necesario, en primer lugar, un debate público en torno a la conveniencia o no de mantener el Pa...

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La Asociación de Defensa Ecológica y del Patrimonio Histórico-Artístico (Adelpha) ha hecho pública una declaración sobre el Patrimonio Nacional, en la que concluye pidiendo la dimisión «inexcusable e inmediata» del Consejo y del resto del equipo rector del Patrimonio Nacional.Este hecho es considerado por la citada asociación como necesariamente previo a cualquier estudio riguroso del patrimonio y su situación. Con todo, Adelpha hace públicos sus criterios globales en torno al Patrimonio. Consideran necesario, en primer lugar, un debate público en torno a la conveniencia o no de mantener el Patrimonio Nacional como entidad independiente, exponiendo que el criterio de la organización es que la conservación y mantenimiento de los bienes culturales pase a depender de la Administración central, máxime desde la creación del Ministerio de Cultura.

Se refieren también al uso de determinados monumentos y a su actual función político-representativa, no siempre ajustada, y denuncian la actual política artística del Patrimonio Nacional que, haciendo caso omiso de la legislación, restaura monumentos e instala museos, olvidando las atribuciones actuales del Ministerio de Cultura. Denuncia también, en este sentido, los accidentes inexplicables, como el extravío, en pleno palacio de Oriente, del gran retablo barroco procedente del hospital de Montserrat, de Madrid, o los atentados artísticos, denunciados en su momento, y sufridos en los palacios y jardines de la Moncloa, La Zarzuela, El Pardo, El Escorial, La Granja, el Alcázar de Sevilla y otros. Asimismo piden que se clarifiquen ciertas actuaciones que unen a los atentados contra el patrimonio cultural de este país, «rasgos de especulación inmobiliaria absolutamente improcedentes en un organismo de tal carácter, como las operaciones de ventas de solares, con consiguiente destrucción o alteración de monumentos, del Buen Suceso, en Madrid, o de la calle de San Fernando, sobre el Alcázar, en Sevilla».

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