El Pentágono evitará que los militares discutan la política oficial

Mientras el general Starry recibía una amonestación del secretario del Ejército norteamericano por sus declaraciones de la semana pasada, en las que anunció la implicación de Estados Unidos en un futuro conflicto chino-soviético, el Pentágono distribuía una circulara todos los oficiales en la que les recuerda su deber de apoyar la política oficial de Washington.El general de tres estrellas Donn Starry fue llamado a declarar a Estados Unidos después de que hubiese hecho su polémica afirmación en una conferencia pronunciada en la República Federal de Alemania, donde está destinado. Starry se ent...

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Mientras el general Starry recibía una amonestación del secretario del Ejército norteamericano por sus declaraciones de la semana pasada, en las que anunció la implicación de Estados Unidos en un futuro conflicto chino-soviético, el Pentágono distribuía una circulara todos los oficiales en la que les recuerda su deber de apoyar la política oficial de Washington.El general de tres estrellas Donn Starry fue llamado a declarar a Estados Unidos después de que hubiese hecho su polémica afirmación en una conferencia pronunciada en la República Federal de Alemania, donde está destinado. Starry se entrevistó durante media hora con el secretario del Ejército, Clifford Alexander, y según el comunicado oficial se expresó al alto jefe militar la preocupación de las autoridades porque no hubiera seguido la norma de consultar con sus superiores antes de hacer una manifestación con implicaciones políticas. El comunicado se refiere a una «falta de sentido» que se suponía debía tener el general, pero resta importancia al asunto al decir que no ha contradicho gravemente la política oficial.

Este es el segundo incidente que se produce en menos de un mes a causa de las declaraciones públicas de un jefe militar norteamericano en el extranjero. El general Singlaub fue destituido de su puesto en Corea del Sur, a finales de mayo, como consecuencia de sus críticas al plan de la Administración Carter de retirar las tropas de tierra estacionadas en Surcorea. En el caso del general Starry, éste debía ser ascendido a general de cuatro estrellas -máximo grado del ejército estadounidense que sólo poseen diez generales- en las próximas, semanas. Pese a la reprimenda, la opinión más extendida es que Starry será ascendido, una vez que su promoción sea aprobada por el Senado.

Para evitar incidentes similares en el futuro, el Pentágono distribuyó una comunicación a todos los oficiales y jefes en la que se recuerda que «una vez que se ha tomado una decisión política por aquellos que tienen autoridad para tomarla, el soldado profesional debe evitar cualquier discusión pública de dicha decisión. En casi ningún caso se servirá al interés de la nación por un militar que exprese su desacuerdo con la política establecida».

La circular, distribuida con carácter prioritario, añade que «está en la mejor tradición del militar norteamericano trabajar enérgica y profesionalmente para efectuar la política decidida por el comandante en jefe». Cualquier alteración de esta norma «rompe esta tradición y es inconsistente con el militar profesional».

Comentando esta circular, un alto funcionario del Departamento de Defensa dijo que su efecto positivo será el que los oficiales no hagan declaraciones en el futuro, contrarias a la política establecida y que podrían tener el efectivo negativo de que los militares se sientan reacios a hacer declaraciones a la prensa. Tras el incidente del general Singlaub, el Pentágono hizo público otro comunicado en que aseguraba que no era su intención censurar o poner trabas a la libre expresión de los militares.

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