Los enseñantes de Castilla y León piden una enseñanza pluralista y regional

Una enseñanza pública de ciclo único, igual para todos, aconfesional y pluralista fue reivindicada por más de trescientos profesionales de la enseñanza reunidos en Salamanca el pasado fin de semana con motivo del primer encuentro de enseñantes de Castilla y León. Asimismo, en uno de los documentos aprobados por la asamblea se reclama «autogestión democrática en los centros de enseñanza por parte de alumnos, profesores y organizaciones de base». En otro documento, los profesionales reunidos en Salamanca procedentes de las distintas provincias castellano-leonesas ofrecieron los principios fundam...

Una enseñanza pública de ciclo único, igual para todos, aconfesional y pluralista fue reivindicada por más de trescientos profesionales de la enseñanza reunidos en Salamanca el pasado fin de semana con motivo del primer encuentro de enseñantes de Castilla y León. Asimismo, en uno de los documentos aprobados por la asamblea se reclama «autogestión democrática en los centros de enseñanza por parte de alumnos, profesores y organizaciones de base». En otro documento, los profesionales reunidos en Salamanca procedentes de las distintas provincias castellano-leonesas ofrecieron los principios fundamentales a nivel económico, político y cultural para la elaboración de una alternativa regional a la enseñanza.Este primer encuentro regional fue convocado al objeto de realizar colectivamente un análisis de los problemas de la enseñanza en la región, elaborar una alternativa a la misma y promover el aumento de la conciencia regional y reivindicativa entre los trabajadores de la enseñanza de Castilla y León. En la elaboración de los documentos aprobados intervinieron representantes de los diferentes sectores: Educación General Básica (EGB), BUP estatal, Universidad, enseñanza profesional, privada, preescolar, especial, educación permanente y trabajadores en paro.

El documento relativo a las reivindicaciones comunes a todos los enseñantes recoge, aparte las ya enumeradas, la exigencia de «control social y planificación de la enseñanza a través de los organismos representativos a nivel regional, provincial y local, donde deben estar presentes los enseñantes elegidos democráticamente en asambleas de centro y con representación de las diversas organizaciones de base». Los profesionales reunidos reclaman la implantación generalizada del principió «a igual trabajo igual salario», la «eliminación de los contenidos reaccionarios y clasistas de la enseñanza y la implantación de otros liberadores y al servicio de los intereses populares de nuestra región». Asimismo, se manifestaron a favor de la igualdad profesional y educativa de la mujer y del salario garantizado para todos los trabajadores.

En el documento que se refiere a la «alternativa regional a la enseñanza» se dice que la educación es un proceso de formación de individuos, que integrados en su realidad regional, sean capaces de transformarla solidariamente con un sentido comunitario. Para que ello resulte posible, afirman la necesidad de las libertades políticas, que permitan una verdadera autonomía regional, la cual requiere ineludiblemente una serie de requisitos básicos.