Europa, interesada en participar de las negociaciones sobre desarme
«La situación actual es favorable para la convocación de una conferencia mundial para el desarme, a condición de que se prepare con detalle», declaró Leo Tindemans, primer ministro belga, a Andrei Gromyko, ministro soviético de Asuntos Exteriores que realiza actualmente una visita oficial de tres días a Bélgica.
La puntualización de Tindemans sobre una conferencia para el desarme internacional se interpreta aquí como un deseo de Bélgica, y otros países europeos, de participar en el gran diálogo Este-Oeste sobre el desarme. monopolizado por Washington y Moscú, tanto en las negociaciones ...
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«La situación actual es favorable para la convocación de una conferencia mundial para el desarme, a condición de que se prepare con detalle», declaró Leo Tindemans, primer ministro belga, a Andrei Gromyko, ministro soviético de Asuntos Exteriores que realiza actualmente una visita oficial de tres días a Bélgica.
La puntualización de Tindemans sobre una conferencia para el desarme internacional se interpreta aquí como un deseo de Bélgica, y otros países europeos, de participar en el gran diálogo Este-Oeste sobre el desarme. monopolizado por Washington y Moscú, tanto en las negociaciones sobre limitación de armas nucleares (SALT II) como las destinadas a una reducción mutua y equilibrada de fuerzas en Centroeuropa (MBFR).Tindemans y Gromyko han tratado de la situación internacional y de las relaciones entre Bélgica y la URSS. Un nuevo acuerdo cultural belga-soviético es el producto concreto de la estancia en Bruselas del jefe de la diplomacia soviética, que llegó el domingo por la noche procedente de Nueva York.
Los resultados de la conferencia europea de cooperación y seguridad, juzgados como satisfactorios por parte de la URSS pero como insuficientes de lado occidental, han sido objeto de análisis entre Groinyko y su colega belga de Asuntos Exteriores, Van EIslande. La Unión Soviética desea preparar el terreno para una segunda sesión de la CESC en el verano de 1977, en Belgrado. Los occidentales no parecen muy entusiasmados, a la vista de las escasas repercusiones de la CESC en el conjunto de países del Este.
Para los observadores resulta muy significativo que Groniyko dedique su estancia en Bruselas a una visita puramente bilateral.
En contra de la mayoría de ministros de Asuntos Exteriores de otros países, que aprovechan su paso por Bruselas para entrevistarse con dirigentes de la CEE, Gromyko no verá a nadie del Mercado Común ni de la OTAN. A pesar de que la URSS muestra últimamente cierto interés en establecer un acuerdo comercial entre la CEE y el COMECON.
Andrei Grornyko tiene anunciada una conferencia de prensa antes de su salida de Bruselas, en dirección a Copenhague, a primera hora de la tarde del martes 5 de octubre.