Predominio del papel

Sigue la evolución negativa, e incluso se ha extendido a más corros, ya que prácticamente sólo se salva el eléctrico, gracias al apoyo inicial. Sin embargo, daba la impresión de que se estaba «cociendo» algo y aunque en Madrid se daba una nueva mínima del año, en las Bolsas de Bilbao y Barcelona había un mayor equilibrio, estimulado institucionalmente.Esto que decimos se podría estar tramando, era la resultante de las reuniones habidas la semana pasada entre los protagonistas del quehacer bursátil y de las que ya dimos puntualmente cuenta. Sin embargo, no podemos hablar de esperanzas, ya que, ...

Sigue la evolución negativa, e incluso se ha extendido a más corros, ya que prácticamente sólo se salva el eléctrico, gracias al apoyo inicial. Sin embargo, daba la impresión de que se estaba «cociendo» algo y aunque en Madrid se daba una nueva mínima del año, en las Bolsas de Bilbao y Barcelona había un mayor equilibrio, estimulado institucionalmente.Esto que decimos se podría estar tramando, era la resultante de las reuniones habidas la semana pasada entre los protagonistas del quehacer bursátil y de las que ya dimos puntualmente cuenta. Sin embargo, no podemos hablar de esperanzas, ya que, está también en función de otras variables exógenas al mercado, léase la evolución política.

En el departamento bancario que continuaba con predominio del papel, destaca la bajada del Atlántico, tras varios días sin operar y la subida del Valladolid, ésta menos espontánea.

Las mejoras de los títulos eléctricos fueron suaves, pero generalizadas (Nansa, Iberduero, Sevillana...).

En alimentación sobresale el bajón de Ebro que arrastraba papel. Sin embargo, el descenso mayor por sectores correspondía a las sociedades de cartera con Española y General desmereciendo.

Entre los valores industriales registramos la baja de algunos punteros, como Dragados y petróleos. En cambio, las síderometalúrgicas presentaban cierta resistencia (Olarra, Tubacex ... ).

Al cierre, menos oferta, pero la demanda seguía apagada.