Veinte mil millones de pesetas ha costado la autopista Bilbao-Behovia

A las cinco horas de esta mañana habrá entrado en servicio la autopista Bilbao-Behovia en toda su extensión, al abrirse al tráfico el nuevo puente internacional entre Bebovia y la población francesa de Biriatou. Al mismo tiempo se ponen en servicio seis kilómetros y medio de la autopista francesa A-63, lo que permitirá efectuar el recorrido Bilbao-San Juan de Luz en un tiempo aproximado de hora y cuarto.Con la apertura del puente internacional se ha completado la primera fase de lo que acertadamente se definió en su día como calle mayor del Cantábrico, y que en la próxima década se prolongará ...

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A las cinco horas de esta mañana habrá entrado en servicio la autopista Bilbao-Behovia en toda su extensión, al abrirse al tráfico el nuevo puente internacional entre Bebovia y la población francesa de Biriatou. Al mismo tiempo se ponen en servicio seis kilómetros y medio de la autopista francesa A-63, lo que permitirá efectuar el recorrido Bilbao-San Juan de Luz en un tiempo aproximado de hora y cuarto.Con la apertura del puente internacional se ha completado la primera fase de lo que acertadamente se definió en su día como calle mayor del Cantábrico, y que en la próxima década se prolongará hasta la vieja Finisterre.

Ocho años han transcurrido desde que se adjudicaron las obras de esta empresa, considerada por aquel entonces casi titánica. De alguna manera era la lucha de.la ingeniería moderna contra las dificultades impuestas por la orografía vascongada. En medio quedan cerca de 20.000 millones de pesetas invertidos para hacer posible cubrir en sólo una hora la distancia que separa Bilbao de la frontera francesa, que hasta hace no tantos años costaba al menos 180 minutos de arriesgada conducción.

Las grandes cifras

La autopista Bilbao-Behovia, conocida casi familiarmente como la B-B, abrió en nuestro país la era de las autopistas. Acostumbrados a los sinuosos trazados de nuestras carreteras, al final de los 60, las autopistas eran casi el sueño inalcanzable de un país que necesitaba sus recursos financieros para otros despegues más directamente productivos.El capital vasco supo ver, sin embargo, la rentabilidad de un mejor sistema de comunicaciones y puso en ello el ímpetu que ha sabido mostrar en otras empresas. Losdatos que analizaremos más adelante vendrári a demostrar que la inversión ha sido rentable, por sí misma, sin tener en cuenta los beneficios que han podido derivarse hacia otras actividades industriales.

He aquí, en primer lugar, las grandes cifras de la autopista y sus fechas más significativas:

-Presupuesto total, unos 20.000 millones de pesetas, de los que 2.500 corresponden a expropiación.

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-Fecha de adjudicación, 14 de marzo de 1968. La sociedad promotora estaba constituida por Ferrovial, SA, Laing y la empresa francesa CFE.

-Constitución de Europistas, 21 de mayo de 1968. A la empresa constructora se han unido los Bancos y Cajas de Ahorros de las rial. Consideraciones objetivas aparte, el costo por kilómetro se ha

-Firma de las escrituras de concesión, 6 de junio de 1968. Se fija un período de explotación de 35 años, que finaliza en la misma fecha del año 2003.

-Comienzo de las obras, 26 de mayo de 1969. Las grandes excavadoras empiezan a trabajar en la zona de Amorebieta.

-Entrada en servicio del primer tramo entre Basauri y Amorebieta, 25 de junio de 1971.

-Apertura al tráfico del puente internacional, 30 de junio de 1976.

En medio queda una longitud total de autopista de 111 kilómetros, que a un turismo le cuestan 245 pesetas, esto es, 2,20 pesetas/km. Un importe muy superior al de las autopistas italianas, que pasan, por ser las más caras de Europa.

«La razón -nos dicen- está bien clara. No hay más que mirar el mapa y ver nuestra orografía, contantos desniveles por salvar túneles, barrancos y ríos. Como dato significativo, puede afirmarse que esta autopista ha salido tres veces más cara que la Sevilla-Cádiz-, por ejemplo».

Con todo, algunos expertos opinan que la B-B se ha beneficiado, tanto en sus tarifas como en el plazo de adjudicación, por ser la primera autopista de nuestro país. Ha sido, una vez más, la rentabilidad del riesgo empresarial. Consideraciones objetivas aparte, el costo por kilómetro se ha cifrado en torno a los 130 millones de pesetas.

Dieciocho años para ganar

Los últimos datos facilitados por la empresa adjudicataria señalan que la autopista ha sido utilizada ya por más de 20.000.000 de vehículos. El día de mayor intensidad fue el 20 de diciembre último, con un total de 32.000 usuarios. ¿Responden estas cifras a los cálculos iniciales?«No. Hay un desfase de un 5 por 100 que podría deberse a las circuristancias económicas y al encarecimiento de la gasolina. También han influido circunstancias políticas en el tráfico fronterizo. Con todo, calculamos que a partir de 1985 empezaremos a resarcimos".

Son, por tanto, dieciocho años para ganar. Tal vez demasiado tiempo. De todas formas, es bien cierto que sólo desde perspectivas de alta rentabilidad económica fue posible el despegue de las autopistas y, en este sentido, hay que reconocer a los promotores de la Bilbao-Behovia el mérito de haber sido los pioneros.

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