Alfie, el pequeño deportista criticado por su obesidad que ha conmovido al mundo del rugby
Un mensaje de denuncia de su padre se hace viral y conmueve a las grandes estrellas de un deporte que siempre se felicitó por ser inclusivo
Dijo el político británico Winston Churchill que el rugby era “un deporte de hooligans jugado por caballeros”. Y, desde entonces, hay pocas definiciones que gusten más a los amantes de este deporte centenario. Otro político, el sudafricano Nelson Mandela, echó mano del rugby para armonizar las relaciones de negros y blancos en un país que empezaba a dar la espalda al apartheid. Así lo contaba John Carlin en el libro El factor Humano (Seix Barral, 2008), ese que inspiró la pelí...
Dijo el político británico Winston Churchill que el rugby era “un deporte de hooligans jugado por caballeros”. Y, desde entonces, hay pocas definiciones que gusten más a los amantes de este deporte centenario. Otro político, el sudafricano Nelson Mandela, echó mano del rugby para armonizar las relaciones de negros y blancos en un país que empezaba a dar la espalda al apartheid. Así lo contaba John Carlin en el libro El factor Humano (Seix Barral, 2008), ese que inspiró la película Invictus dirigida por Clint Eastwood y protagonizada por Morgan Freeman y Matt Damon. Casi 30 años después de aquella Sudáfrica que logró el campeonato del mundo, además de una mayor unidad de su país, el rugby vuelve a movilizarse. Ya no por el racismo, sino por el acoso y la intimidación en redes sociales. Ha ocurrido a raíz de un mensaje de denuncia de un padre en Twitter.
“Tuve que eliminar un mensaje de Facebook porque un idiota puso un comentario diciendo que mi hijo es demasiado grande para jugar con los menores de 12 años y que no está sano. Si la gente pudiera saber cuánto trabaja para ponerse en forma y cómo de baja es su confianza en sí mismo. No te preocupes Alfie, yo siempre seré tu mayor fan”, escribía Mark Pugsley. El mensaje iba acompañado de una foto de Alfie, su hijo, un niño con sobrepeso y jugador de los Oakdale, al sudeste de Gales, cerca de Cardiff. En un país en el que el rugby es religión, el tuit del padre se hizo viral. Dos días después acumulaba 14.000 retuits, 220.000 me gusta y más de 11.000 mensajes.
No era aquella la primera foto de Alfie que Pugsley publicaba en las redes sociales. Su cuenta de Twitter está llena de mensajes sobre rugby y fotos de su hijo y de su equipo, desde donde salieron algunos de los primeros mensajes de apoyo al chico. “Alfie es muy respetado además de uno de los miembros clave de nuestro equipo. Y sobre todo un chico adorable. Los entrenadores del Oakdale os hacemos saber que tiene todo nuestro apoyo y que siempre estará de nuestro lado”, escribía Dana Johnson, miembro del club de rugby.
Desde entonces, Alfie, ahora mundialmente conocido, recibió el apoyo de algunas de las mayores estrellas del deporte que practica desde pequeño. Uno de los mensajes más emotivos llegó desde Francia. El jugador internacional Matthieu Jalibert le escribió: “Alfie, tuve que escuchar durante toda mi juventud que era demasiado pequeño, demasiado delgado, demasiado flaco. Cuando leo la publicación de tu papá, me duele el corazón. No pierdas jamás la esperanza. Cree en tus sueños. Tu papá es tu primer fan. Yo soy el segundo”.
El joven deportista también recibió mensajes de una de las estrellas de los All Blacks, el neozelandés Jerome Kaino; del sudafricano Tendai Mtawarira, apodado La Bestia; o del ex jugador británico y comentarista de televisión Alex Corbisiero, que incluso compartió una foto suya de niño. “Colega, tienes todo mi apoyo -le escribió Mtawarira. Yo también pasé por lo mismo una vez cuando la gente me machacaba por mi talla y ponía en duda que tuviera la edad para competir con mi grupo de edad. Mantén la cabeza alta y no dejes nunca que los haters puedan contigo. El juego del rugby es para todos”.
Efectivamente, el rugby siempre se felicitó por ser inclusivo, democrático, por acoger a chicos más grandes o más menudos, corpulentos y finos, de hecho es parte de su secreto. Y de su idiosincrasia, la de esos hooligans que juegan como caballeros, la de delanteros pesados y grandullones. Así se lo recordaba también Kaino: “Nuestro precioso juego es para todos los géneros, para todas las clases sociales, todas las formas y tallas. Mantén esa sonrisa en tu cara y tu magnífico trabajo”.
Así fue como uno de los llamados trolls de las redes sociales despertó el lado más solidario de los usuarios y de los amantes del rugby.
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