Renuncias, filtraciones y un allanamiento: los nuevos episodios de la telenovelesca trama del ‘caso Lencería’
El gobernador del Biobío ha confirmado la salida de tres de sus colaboradores directos mientras el exseremi Eduardo Vivanco demandará a Camila Polizzi, ‘exinfluencer’ que lo acusó por una supuesta amenaza de muerte
El caso Lencería, la telenovelesca arista del caso Convenios, sigue sumando episodios que sacuden a la política chilena. Este lunes se ha confirmado la salida de tres funcionarios de confianza del gobernador de la región del Biobío, Rodrigo Díaz Worner, que tendrían vinculaciones políticas con la trama protagonizada por la excandidata diputada Camila Polizzi, exinfluencer y excreadora de contenido de sátira política.
La autoridad regional, un exmilitante democristiano que actualmente es independiente, ha anunciado en un comunicado las salidas del administrador regional, Rodrigo Martínez Fernández; el jefe de Gabinete, Rodrigo Alarcón Quezada; y el jefe de la División de Desarrollo Social y Humano, Simón Acuña Medina. Todos son parte de su círculo directo de confianza, por lo que sus caídas implican un duro golpe político. En el texto se destacó que, desde ahora, el gobernador “liderará una transformación profunda en el Gobierno regional del Biobío [a unos 500 kilómetros al sur de Santiago de Chile] con el fin de entregar mayor transparencia y celeridad en la resolución de los anhelos que tiene la región”.
Tras el anuncio, la Policía de Investigaciones llegó hasta las oficinas del Gobierno del Biobío para cumplir con una orden judicial de registro e incautación. En el allanamiento, los detectives esperan obtener documentos y computadores, los que serían incluidos en la indagatoria encabezada por la Fiscalía del Biobío.
El gobernador Díaz ha asumido la responsabilidad política sobre las eventuales irregularidades que se detecten en la investigación, aunque también ha apuntado a algunos funcionarios, específicamente a Tamara Vidal, la encargada de la Unidad de Participación Ciudadana de la gobernación, quien era la contraparte en el convenio firmado con la fundación En Ti, vinculada a Polizzi. Esta fundación se adjudicó 250 millones de pesos (unos 290.000 dólares) para eventualmente ejecutar proyectos sociales.
Compra de ropa interior
Polizzi era representante legal de la Fundación Capital Social, dedicada a desarrollar proyectos para la comunidad de la zona. La entidad no existe oficialmente, según informó el Ministerio de Justicia a la radio Biobío. El mismo medio destapó el 13 de julio pasado que el Gobierno Regional de Biobío le asignó 250 millones de pesos (290.000 dólares) a la fundación En Ti, a la que Polizzi “arrendó” el nombre y la respectiva firma electrónica por 10 millones de pesos (11.700 dólares). El programa por el que recibió los fondos públicos consistía en 45 talleres para los cuales se contrataron los servicios de la consultora EQOS y el (Organismo Técnico de Capacitación) OTEC Frumisal Limitada.
El día anterior a que la Fundación En Ti firmara el primer contrato con OTEC Frumisal Limitada, Sebastián Polanco, pareja de Polizzi, compró la empresa, que supuestamente ejecutaría gran parte de los talleres. Del total del presupuesto asignado, la fundación le transfirió 93,5 millones de pesos (109.000 dólares) a OTEC. Polanco adquirió la entidad junto a su amigo Matías Godoy, que quedó a cargo del 95% de la sociedad y como su representante legal. Cuando los medios de comunicación se hicieron eco de las artimañas, Godoy se autodenunció a la Policía de Investigaciones, PDI, asegurando que ingresó a la sociedad como “un favor” a su amigo, que era él quien tomaba todas las decisiones, y que ahora entendió que lo habían utilizado como un “palo blanco”.
“Siempre se me dijo lo que tenía que hacer (…) En realidad me engañaron, porque me reiteraron en muchas ocasiones que no había ninguna irregularidad”, sostuvo Godoy. Entre los antecedentes que aportó a las autoridades figuraba el detalle de los gastos asociados a la cuenta corriente de la OTEC Frumisal: reiteradas compras en la tienda de lencería femenina Intime y de otras marcas como Zara y Saville Row. También aparecen muchos restaurantes y delivery, según la autodenuncia a la que tuvo acceso el Diario Digital del Gran Concepción. Las fotografías en ropa interior de la etapa de modelo de Polizzi y los gastos en Intime condujeron a que la trama se conociera públicamente como caso Lencería.
Exseremi anuncia querella contra Polizzi
En paralelo a las renuncias e incautaciones en el Gobierno del Biobío, el exsecretario ministerial de la Secretaría de Gobierno (Seremi) del Biobío, Eduardo Vivanco, anunció que presentaría una querella en contra de Polizzi tras la filtración de un audio en donde él, supuestamente, la amenaza de muerte.
La exinfluencer aseguró que el exfuncionario gubernamental, Vivanco, la amenazó de muerte durante una reunión para que ella entregara datos a la justicia a personas específicas. “El seremi de Gobierno, Eduardo Vivanco, habla expresamente de sicariato. ‘¿Cuánto cuesta un colombiano?”, señaló la excandidata. Días después el medio de comunicación local Sabes publicó un audio de una reunión privada en donde Vivanco consulta en repetidas oportunidades sobre el valor de contratar a “un colombiano”.
El exseremi este lunes sacó la voz y dijo que demandará a Polizzi por la publicación del diálogo. Además, intentó explicar sus palabras y se disculpó con la comunidad de migrantes colombianos de Chile, a la que asoció al sicariato. “Fue una metáfora, mal utilizada, para que ella entregara todos los antecedentes, porque era muy serio en lo que ella estaba involucrada. Era mucho dinero de por medio, por lo tanto, ella podría tener una situación que le afectara en lo personal”, ha manifestado.
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