Una ley para proteger a los trabajadores de la prensa: el proyecto del Gobierno de Chile por la libertad de expresión

El Gobierno de Gabriel Boric ha reflotado un proyecto de ley que busca proteger a los trabajadores de la prensa. Lo ha hecho justamente un año después de que el 1º de mayo de 2022, una periodista fuera asesinada por en medio de un ataque de vendedores callejeros, cuando trabajaba en la cobertura de la marcha del Día Internacional de los Trabajadores. La ministra ministra Secretaria General de Gobierno, Camila Vallejo, ha mencionado la propuesta durante una exposición realizada ante la Asamblea de la ONU en Nueva York, a propósito de la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa, una jornada en la que se busca fomentar el ejercicio libre de la comunicación a nivel global.

La moción de origen parlamentario surgió a partir del caso de Francisca Sandoval, una reportera del canal Señal 3 La Victoria, que recibió un disparo en su cabeza mientras se encontraba en el barrio Meiggs, uno de los sectores comerciales masivos de Santiago de Chile. La comunicadora observaba cómo algunos ambulantes amedrentaban a los asistentes de la manifestación y en ese momento fue atacada. Agonizó por cerca de dos semanas en un recinto de salud de la asistencia pública.

El proyecto de ley, que consiste en una modificación del Código Penal chileno para establecer una protección especial para las personas que ejerzan labores de comunicación y periodísticas, fue presentado por los senadores Claudia Pascual, Esteban Velásquez y Alejandra Sepúlveda, todos integrantes de la coalición de izquierdas que respalda al Ejecutivo, que decidió darle el patrocinio para conseguir un avance legislativo más expedito.

“Hemos establecido un compromiso respecto a la protección y el resguardo de la función de trabajadores de las comunicaciones, no solamente de las y los periodistas, sino también camarógrafos, fotógrafos, reporteros, editores e incluso aquellos que contribuyen a la movilización de los equipos de prensa para hacer una cobertura”, declaró Vallejo, exdiputada comunista, que saltó a la primera línea de la escena pública chilena siendo muy joven, en las movilizaciones estudiantiles chilenas de 2011.

Vallejo ha mencionado que el compromiso de la autoridad será “garantizar que no haya impunidad y que los procesos de investigaciones y judiciales lleguen a puerto cuando sucedan distintos tipos de agresión que constituyen delitos para estos trabajadores y trabajadoras”. Esto se lograría con un acuerdo entre los diputados y senadores chilenos, quienes deberán debatir una propuesta construida sobre la base de una Ley Marco de Unesco para la Protección de los Trabajadores de las Comunicaciones.

“El Gobierno del presidente Gabriel Boric tiene la convicción de que debemos profundizar estos debates y que debemos conversar globalmente sobre cómo seguimos garantizando y fortaleciendo los derechos asociados a la comunicación e información, además del ejercicio del periodismo y la diversidad de los medios de comunicación”, ha complementado.

En su viaje a Nueva York, la chilena concretó encuentros con Samantha Power, administradora de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por su sigla en inglés); Thomas Guerber, secretario de Estado adjunto del Departamento Federal de Asuntos Exteriores de Suiza; y Anna Lührmann, ministra de Estado para Europa y Clima del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores de Alemania.

Chile como epicentro de la libertad de prensa

La portavoz gubernamental ha anunciado ante la ONU, además, que Chile será la sede de la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa 2024, transformándose en el epicentro de la discusión sobre el desempeño de los medios y las normativas vigentes para la protección de los comunicadores a nivel global. “Nos llena de orgullo y nos invita a garantizar las mejores condiciones para que los debates con representantes de la academia, la política y la sociedad civil prosperen mediante el intercambio de ideas”, manifestó.

La ministra resaltó el simbolismo de recibir la invitación en medio de la conmemoración de los 50 años del Golpe de Estado en Chile, período que dio inicio a una dictadura militar que persiguió a decenas de periodistas que informaban sobre la represión política y los problemas económicos que afectaban a los ciudadanos entre 1973 y 1990.

Sobre esto, la portavoz del Gobierno manifestó que, tras el derrocamiento del expresidente socialista Salvador Allende el 11 de septiembre de 1973, “se dio inicio a uno de los períodos más sombríos y desgarradores de nuestra historia, que nos obliga a mirar los viejos y nuevos desafíos de nuestras democracias, de nuestras deudas en materia de derechos humanos, verdad, justicia y reparación”.

El país sudamericano conmemorará las cinco décadas del golpe en un ambiente polarizado, marcado por un segundo proceso constitucional que tendrá como hito la elección de los integrantes del consejo el próximo domingo 7 de mayo. Los comicios se perfilan como una prueba de fuego para el presidente Boric, que podría recibir un duro golpe si es que la oposición –agrupada en la derecha tradicional de Chile Vamos, la derecha extrema del Partido Republicano y el populista Partido de la Gente–, consiguen el control de la asamblea redactora.