Condenada por blanqueo la narcoabogada Tania Varela

Salda las cuentas con la justicia después de escaparse cinco años de la Interpol

Ficha policial de Tania Varela

La abogada y narcotraficante gallega Tania Varela, de 44 años, ha sido condenada por la Audiencia de Pontevedra a un año y ocho meses de prisión y multa de 56.000 euros por blanquear dinero obtenido de alijos de cocaína. Pese a que Varela estuvo cinco años en busca y captura, las magistradas del tribunal han aplicado la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas en la instrucción de la causa y han reducido a la mitad la condena que solicitaba la fiscalía.

Pese a que la acusada se defendió afirm...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La abogada y narcotraficante gallega Tania Varela, de 44 años, ha sido condenada por la Audiencia de Pontevedra a un año y ocho meses de prisión y multa de 56.000 euros por blanquear dinero obtenido de alijos de cocaína. Pese a que Varela estuvo cinco años en busca y captura, las magistradas del tribunal han aplicado la atenuante muy cualificada de dilaciones indebidas en la instrucción de la causa y han reducido a la mitad la condena que solicitaba la fiscalía.

La narcoabogada se fugó en 2013 para eludir una condena de siete años de prisión y multa de 318 millones por tráfico de cocaína, actividad en la que se involucró tras asumir en 2004 la defensa del narco David Pérez Lago con el que mantuvo una relación sentimental. Su larga escapada la aupó en la lista de Europol como la prófuga más buscada, con tres órdenes de detención por narcotráfico y blanqueo, hasta que fue detenida en marzo del pasado año en Sitges (Barcelona), donde había fijado su residencia con una identidad falsa.

Pese a que la acusada se defendió afirmando que siempre rechazó el narcotráfico “y todo eso, y solo me he dedicado a mi trabajo de abogada”, la Audiencia ha constatado todo lo contrario. Las tres magistradas de la Sección Cuarta de Pontevedra destacan las “maniobras llevadas a cabo por la sospechosa para ocultar la titularidad de los bienes” y aseguran que “el origen delictivo de las cantidades blanqueadas” está acreditado.

El fallo difundido este viernes dice que la acusada, “como consecuencia de la actividad de narcotráfico” a la que se dedicaba, se ha “enriquecido” y, durante los años 2005 y 2006, ha realizado “operaciones con la finalidad de dar entrada en el tráfico mercantil lícito al dinero procedente del narcotráfico”.

Es la segunda vez que Tania Varela se sienta en el banquillo por su implicación con la cocaína, justo cuando abandonó su cargó en el Ayuntamiento de Cambados (Pontevedra) como directora del Centro de Información de la Mujer. En 6 julio de 2011, la Audiencia Nacional la condenó por formar parte de una organización, liderada por su expareja, que en apenas un mes había introducido a través de las costas gallegas dos alijos de cocaína, uno de 2.000 kilos y días después, otro de 1.700. En esta segunda descarga que tuvo lugar en la ría de Corme (A Coruña) en abril de 2006, Varela y Lago (hijastro de Laureano Oubiña) fueron capturados por la Policía y entonces comenzó la guerra entre ambos que acabó en ruptura.

A ella le cayeron 7 años de prisión y una multa de 318 millones de euros por tráfico de cocaína, condena que no cumplió y optó por fugarse a raíz del asesinato en 2008 en Madrid del que entonces era su pareja, el abogado Alfondo Díaz Moñux. Tanía dejó plantado al tribunal que juzgó a los sicarios que descerrajaron varios tiros contra Moñux, pese a ser la principal testigo de cargo del juicio, ya que iba de copiloto del abogado en el momento del crimen.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tras analizar las pruebas, el tribunal ha concluido que hay “indicios plurales y de entidad suficiente” que acreditan que la investigada ha ejecutado operaciones “cuyos pagos en efectivo denotan el manejo concreto de cantidades de dinero que no se justifican” y que suponen “la ocultación de al menos 70.000 euros, poco acordes con su nivel de ingresos”.

Archivado En