La Comunidad se echa atrás en el derribo de un edificio protegido
Un organismo del Gobierno regional disponía ya de licencia de demolición para el inmueble
Finalmente la Comunidad de Madrid no derribará un edificio de 1903 situado en la calle del Doctor Esquerdo, 44 y considerado Bien de Interés Cultural. Un organismo del Gobierno regional había conseguido el 10 de julio licencia de demolición y un portavoz de la Consejería de Políticas Sociales llegó a admitir que el derrumbe era inminente. Pero a última hora de ayer, la Dirección General de Patrimonio Cultural informó a EL PAÍS de que los planes se paralizaban.
La suerte del edificio, que forma un conjunto con la residencia de mayores La Paz, ha enfrentado desde 2010 a dos departamentos del Gobierno regional: por un lado, la Consejería de Políticas Sociales y Familia, de quien depende la infraestructura y, por otro, la Comisión Local de Patrimonio Histórico (CLPH), que —pese a su nombre— también depende del Ejecutivo de Cristina Cifuentes.
En octubre 2010 y a instancias de Políticas Sociales, la sociedad de Arrendamientos y Promociones de la Comunidad de Madrid (Arproma) solicita licencia para la demolición total del inmueble, situado en la es...
La suerte del edificio, que forma un conjunto con la residencia de mayores La Paz, ha enfrentado desde 2010 a dos departamentos del Gobierno regional: por un lado, la Consejería de Políticas Sociales y Familia, de quien depende la infraestructura y, por otro, la Comisión Local de Patrimonio Histórico (CLPH), que —pese a su nombre— también depende del Ejecutivo de Cristina Cifuentes.
En octubre 2010 y a instancias de Políticas Sociales, la sociedad de Arrendamientos y Promociones de la Comunidad de Madrid (Arproma) solicita licencia para la demolición total del inmueble, situado en la esquina de las calles de Doctor Esquerdo y Doctor Castelo. La comisión regional (CLPH) se lo deniega “considerando el inmueble protegido en su totalidad”. Además, el organismo municipal análogo, la Comisión para la Protección del Patrimonio Histórico, Artístico y Natural, ratifica el dictamen anterior y señala además que el edificio tiene “catalogación estructural”.
En 2011, Arproma interpone un recurso de reposición contra la denegación de la licencia y pide una nueva resolución al respecto. En 2012 se estima el recurso de este organismo regional que presenta alegaciones a la denegación.
Ese mismo año, la Comisión Local de Patrimonio Histórico vuelve a denegar la licencia: “el edificio se encuentra dentro del entorno de protección del Conjunto Histórico Villa de Madrid, declarado Bien de Interés Cultural según Decreto 41/1995 para el cual es de aplicación el régimen de protección de los conjuntos históricos [...] en los que las demoliciones de inmuebles son excepcionales y deben estar justificadas”.
La comisión de patrimonio regional va más allá: “el edificio objeto de esta licencia, llamado en origen Pabellón de Externas, fue construido entre 1903 y 1920 por el mismo arquitecto (Luis María Argenti) que hizo el colegio de La Paz, con los mismos materiales, alturas y criterios compositivos que este, por lo que se considera su pérdida un menoscabo de los valores del conjunto de edificios del colegio”.
A pesar de estas dos negativas, Arproma interpone otro recurso ante los tribunales, que le dan la razón en mayo de 2016. “El Ayuntamiento podía haber apelado en ese momento, pero no lo hizo”, critica Mercedes González, concejal del PSOE en Madrid. El Consistorio no ha explicado por qué no se apeló esta decisión.
El resultado del proceso es que el 10 de julio, el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid (BOCM) publica la resolución que permite el derribo del inmueble de principios del siglo XX. Un portavoz de Políticas Sociales señaló el martes que “se trata de un pequeño edificio antiguo que ya no se utiliza y se va a demoler para mejorar el funcionamiento de la residencia contigua”.
La concejal socialista Mercedes González, que pidió el viernes al Ayuntamiento que revocase la licencia de derribo, responde: “Me parece alarmante que la propia Administración sea proactiva para demoler un conjunto que su propia Comisión de Patrimonio considera BIC”.
Sin embargo, a última hora de este miércoles la situación cambió: la dirección regional de Patrimonio paralizó los planes. “Cuando esa información ha llegado a Patrimonio, el departamento ha paralizado los planes. No se va a demoler el edificio”, explicó a EL PAÍS Jaime de los Santos, director de la Oficina de Cultura y Turismo de la Comunidad. De los Santos pide que se actualice el Catálogo de Elementos Protegidos municipal para intentar evitar que en el futuro se repita este caso.
Un inmueble de 1903 obra de Luis Argentí
En 1903 se crea el asilo de San José para niños de La Paz y la Inclusa, con un primer edificio asistencial, cuyo proyecto se encomienda a Luis María Argentí, arquitecto jefe de la provincia. Incluye un pabellón que da a Doctor Castelo para clases a externas. Según la Guía de Arquitectura del colegio de arquitectos, "el conjunto mantiene cierta unidad formal: arquitectura racional de ladrillo sin alardes estilísticos".