Un curry muy callejero

En sánscrito Surya significa sol. De hecho es el nombre de la deidad hindú que representa a la estrella. También el del nuevo restaurante indio en pleno Callao (Tudescos, 4; 912 54 53 06; unos 20 euros por persona; menú del día por 10 euros). Al cruzar la puerta recibe un local colorido y ecléctico: "Esta es la planta callejera, en la que puedes picar algo o llevártelo para llevar", cuentan desde el restaurante. De hecho parece un local de cocina india del centro de Londres. Por encima, aparece un espacio que re...

En sánscrito Surya significa sol. De hecho es el nombre de la deidad hindú que representa a la estrella. También el del nuevo restaurante indio en pleno Callao (Tudescos, 4; 912 54 53 06; unos 20 euros por persona; menú del día por 10 euros). Al cruzar la puerta recibe un local colorido y ecléctico: "Esta es la planta callejera, en la que puedes picar algo o llevártelo para llevar", cuentan desde el restaurante. De hecho parece un local de cocina india del centro de Londres. Por encima, aparece un espacio que recuerda más al comedor de una casa —"es el hogar"— y donde se puede comer en un ambiente algo más tranquilo.

Ambos espacios comparten una carta informal en la que aparecen todo tipo de especialidades indias: pakoras de pescado blanco, naan relleno de queso, biryani de verduras, cordero tika masala, y varios currys. Destacando entre estos últimos el que denominan "plato estrella": curry de pollo con mantequilla (Butter chicken en carta). Si en un primer momento la decoración y los aromas trasladan a India, los bocados saben al país asiático. Incluyendo su afición al picante. La intensidad del picante se puede matizar en función de los gustos del comensal (light, medium y hot), pero los verdaderos aficionados no se irán decepcionados.

Surya esconde un tercer espacio: su cueva. "Es la cara más canalla", avisan desde el local. Aunque todavía no han inaugurado, en esta zona con sofás y sesiones de DJ, ya se pueden probar los cócteles que ofrecerán en su carta: una revisión de algunos combinados clásicos como el Margarita Chai o un Bloody Mojini: como un Bloody Mary, pero más contundente... y picante.