Metro Bilbao presta provisionalmente el servicio del ascensor de Begoña
Está previsto que el Gobierno vasco se haga cargo del clásico elevador abierto en 1949
El ascensor a Begoña, abierto en 1949 para conectar el Casco Viejo con el barrio, es uno de los grandes iconos de Bilbao. Pero el pasado 8 de julio dejó de hacer viajes tras 65 años. La empresa concesionaria Begoña S.A. no podía hacer frente a sus gastos. El Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Bilbao están a la espera de que revierta la concesión del mítico transporte, pero, desde este lunes, Metro Bilbao estará autorizada a sustituir provisionalmente el servicio con los ascensores ubicados en la estación del Casco Viejo, cuya competencia sup...
El ascensor a Begoña, abierto en 1949 para conectar el Casco Viejo con el barrio, es uno de los grandes iconos de Bilbao. Pero el pasado 8 de julio dejó de hacer viajes tras 65 años. La empresa concesionaria Begoña S.A. no podía hacer frente a sus gastos. El Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Bilbao están a la espera de que revierta la concesión del mítico transporte, pero, desde este lunes, Metro Bilbao estará autorizada a sustituir provisionalmente el servicio con los ascensores ubicados en la estación del Casco Viejo, cuya competencia supuso una de las razones del cierre del elevador decano.
La tarifa de este servicio, hasta ahora exclusivo para los viajeros del Metro que querían llegar hasta Mallona, será la misma que la que tuvo hasta julio el ascensor: 0,45 euros, un viaje y 3,50 euros, un bono de diez. El horario coincidirá, a su vez, con el del metro.
La prestación del servicio sustitutivo se realizará de manera provisional hasta que se resuelva el expediente de resolución del contrato de concesión —que tenía todavía 20 años de vigencia— de los ascensores de Begoña, cuyos bienes revertirán a Administración pública vasca. El Gobierno vasco y el Ayuntamiento de Bilbao procederán entonces a prestar el servicio en una modalidad no concretada. Todo apunta a que la municipalización del servicio haga el ascensor gratuito, como anticipó la semana pasada el concejal delegado del área de Transportes del Ayuntamiento de Bilbao, Asier Abaunza.
El Gobierno vasco argumenta que "La suspensión unilateral del servicio y cierre de las instalaciones ha dejado sin servicio a las personas usuarias de los mismos, y la necesidad de garantizar la movilidad de estos usuarios, justificaba la procedencia de la habilitación de un servicio provisional sustitutivo".